Washington. Estados Unidos prohibió la entrada al país a dos ex altos funcionarios del gobierno del presidente Nicolás Maduro señalados por su presunta vinculación con los apagones de 2019 en Venezuela.

Luis Alfredo Motta, ex ministro de Energía Eléctrica de Venezuela, y Eustiquio José Lugo, ex viceministro de Finanzas, Inversión y Alianzas Estratégicas, fueron acusados por el Departamento de Estado de corrupción y de aceptar sobornos y se les prohibió de forma indefinida la entrada a Estados Unidos.

Los dos antiguos funcionarios también fueron acusados de malversar recursos públicos.

La administración Trump lidera una campaña internacional para propiciar la salida del poder de Maduro, cuya relección en 2018 no reconoce por considerarla fraudulenta.

El Departamento de Estado indicó que los familiares de ambos ex funcionarios tampoco podrán ingresar a Estados Unidos.

El canciller venezolano, Jorge Arreaza, tachó de “puro fake” las sanciones.

Pompeo obstruye las investigaciones a su propia gestión, pero se presenta como el paladín de la lucha contra la corrupción en otros países. Típico doble estándar de la élite corporativa gobernante en Estados Unidos, escribió Arreaza en Twitter.

Ambos ex funcionarios enfrentan cargos por lavado de dinero en un tribunal de Florida, proceso que data de junio de 2019.

En este contexto, el canciller Jorge Arreaza denunció la vandalización de su abandonada embajada en Bogotá, inactiva desde febrero de 2019.

La sede está en ruinas tras ser saqueada durante meses, lo que llevó al gobierno de Maduro a amenazar con acciones diplomáticas recíprocas ante la inaceptable agresión.

Ubicada en el norte de la capital colombiana, la legación no cuenta con vigilancia policial y dentro pueden verse múltiples destrozos.

La cancillería colombiana declinó pronunciarse sobre las acusaciones de Arreaza, pero señaló que la policía no ha reportado actos de vandalismo recientes en el consulado.

Colombia estima que poco menos de 1.8 millones de venezolanos están en su territorio; a raíz de la pandemia, unos 81 mil han regresado a su país.