Washington. El Departamento del Tesoro anunció ayer que el Havana International Bank (Havin Bank Ltd), entidad de capital cubano con sede en Londres, quedó en la lista negra de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) en un nuevo golpe de Estados Unidos contra el sistema financiero de Cuba en su andanada de sanciones económicas contra la isla.

El Havin Bank Ltd opera desde agosto de 1973 y es el único banco de capital cubano que funciona fuera de la isla. Su principal accionista es el Banco Central de Cuba, según datos publicados por este emisor. Con una ubicación privilegiada en la City de Londres, el banco cuenta con una red de 400 corresponsales en el mundo.

Estas sanciones llegan justo cuando el gobierno de La Habana abrió la circulación de dólares permitiendo la venta de alimentos en divisas en algunas tiendas estatales.

John S. Kavulich, presidente del Consejo de Comercio y Economía entre Estados Unidos y Cuba, explicó que la estrategia de la OFAC consiste en hacer que todas las transacciones que involucren exportaciones desde o importaciones hacia, o servicios que vengan de Cuba resulten más caras, ineficientes y complicadas.

El gobierno de Donald Trump revirtió la apertura con Cuba promovida por su predecesor demócrata Barack Obama, endureciendo el bloqueo que rige desde 1962, con el argumento de violaciones a los derechos humanos en la isla y el apoyo al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.

En tanto, durante una audiencia en el Congreso, el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Mike Pompeo, reiteró que la postura del gobierno hacia Maduro es no negociar más que su salida del poder, al responder a una pregunta del senador republicano Marco Rubio.

El gobierno de Maduro anunció ayer que reactivó sus contactos con Noruega, que el año pasado medió en un intento fallido de diálogo con la oposición.