La corrupción que imperó en las anteriores administraciones en la hoy alcaldía de Cuauhtémoc, al autorizar obras que no cumplían con el Reglamento de Construcciones, ha provocado daños en viviendas de los vecinos, como es el caso de la colonia Hipódromo Condesa, afirmó Rafael Guarneros, coordinador del comité fundacional de la asociación de residentes.

Ejemplo de ello, dijo, es un edificio en la calle Saltillo número 70, que cada año, en temporada de lluvias, se inunda de aguas negras debido a la construcción de un edificio contiguo que ha ocasionado grietas en el inmueble desde hace cuatro años, situación que se ha convertido en un problema de salud pública al meterse el agua de caño al edificio, y peor aún, conviviendo con el Covid-19.

Indicó que el tipo de subsuelo en la colonia es de arcillas compresibles y contiene mucha agua, pues los mantos freáticos están a metro y medio, por lo que cada que se realiza una obra, sobre todo edificios que incluso pueden rebasar la norma en la zona, se hacen grandes excavaciones que, aunadas a la extracción de agua, producen hundimientos.

Éstos ocasionan que el drenaje quede arriba y las construcciones abajo, lo que origina que, cuando llueve, el drenaje ya no tenga la capacidad de expulsar esa agua debido a la inclinación de la tubería, ocasionando que regrese no sólo el líquido del inmueble, sino del colector terciario, responsabilidad que también corresponde a los directores responsables de obra, expresó.

Con esta situación coincidieron inquilinos que tienen más de cinco décadas viviendo en el edificio de la calle Saltillo número 74, al mencionar que desde 2016, cuando empezó la construcción del edificio de Saltillo 70, trajo diversas afectaciones que con el paso de los años se han agudizado.

El patio queda lleno de aguas negras y el olor es insoportable, tanto que nos ha obligado a que en la madrugada lo estemos lavando, además de que por la humedad las paredes se pusieron negras y se han perdido muebles.

Indicaron que varias son las quejas reportadas en la alcaldía y la coordinación territorial, de las que hemos recibido cierto apoyo porque han venido a desazolvar, pero de poco sirve; además, la bomba que adquirieron hace tres años ya resulta insuficiente.