El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, investigado por las autoridades en Suiza, piensa que es intocable, estimó ayer su predecesor en el cargo, Joseph Blatter, quien pidió la apertura de una investigación de la Comisión de Ética de la organización que dirige el futbol mundial. Debería inmediatamente abrir una investigación, como hicieron contra mí, dijo Blatter. El dirigente del organismo mundial es objeto de un proceso penal en Suiza debido a un encuentro entre el fiscal general Michael Lauber e Infantino por los casos de corrupción relacionados con el FIFAgate. El helvético también es investigado penalmente y está suspendido hasta 2021 por la justicia interna de la FIFA por el controvertido pago de dos millones de francos suizos a Michel Platini.