Vamos contra abusos: Mandataria
Lunes 24 de agosto de 2020, p. 31
La jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum admitió que hay líderes de comerciantes ambulantes que, además de utilizar a personas en situación de vulnerabilidad para ocupar el espacio público, explotan a sus agremiados y les quitan buena parte de los recursos que obtienen
por la venta en vía pública.
Es común que se siga utilizando prácticas de clientela política, de abuso en muchos casos de líderes hacia personas que tienen un trabajo digno, vendiendo en vía pública, porque así se ha dedicado su familia desde hace mucho tiempo o sencillamente porque no se les han dado otras oportunidades
, expresó.
En conferencia, señaló que para atacar esa situación se realizan censos individuales
con el propósito de que cada vendedor tenga una relación directa con la autoridad, sin intermediarios, no sólo en el Centro Histórico, sino también en otras zonas.
Dijo que todas las personas tienen derecho a organizarse y tener a sus líderes, pero el problema es cuando éstos se aprovechan, y ahí es donde nosotros queremos intervenir y que se acabe esa corrupción
, subrayó.
Esto sólo se logra a partir de censos, de derechos y reglas bien establecidos
, y que el pago por el uso de la vía pública sea directamente al gobierno y no a través de liderazgos, manifestó la titular del Ejecutivo local.
Señaló que en el caso de las organizaciones en situación de vulnerabilidad, como adultos mayores o con discapacidad, quienes dirigen esas organizaciones las utilizan no para darles una oportunidad de trabajo, sino más bien para explotarlos, porque les quitan buena parte de los recursos de lo que venden.
Lo que queremos es que haya una relación directa entre la persona (el comerciante) y el gobierno
, señaló Sheinbaum, quien acotó que ésa es la instrucción que dio en lo particular al nuevo secretario de Gobierno, José Alfonso Suárez del Real.
La idea, insistió, es que se acabe esa corrupción, esa clientela y, en todo caso, si quieren organizarse, pues están en todo su derecho, pero que no sea mediante el pago de una cuota para poder trabajar en la vía pública
, dijo la jefa de Gobierno.
Tan sólo en el Centro Histórico, se calcula que hay al menos 90 líderes que controlan el comercio ambulante, para lo cual utilizan como escudos a personas en situación vulnerable con el fin de evitar que personal del gobierno capitalino y policías los retiren. De acuerdo con autoridades capitalinas, Alejandra Barrios y sus hijos Diana, Silvia Graciela, Rubén, Sergio y Marlen Sánchez Barrios controlan una cuarta parte de las calles del Centro.