Nuestra visión de democracia aquí nos la jugamos, nos jugamos también el proyecto de país que queremos alcanzar, declaró la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, durante la reunión de la Comisión para la Primera Infancia del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna).

Advirtió que para el país es vital revertir la situación de pobreza y vulnerabilidad de los niños, y destacó que, desde antes de la pandemia, México ya enfrentaba condiciones complejas para este grupo poblacional de entre cero y cinco años de edad, integrado por 13 millones de habitantes: altos índices de pobreza, de desigualdad, exclusión y de carencia de servicios.

Por tanto, al atenderla nos jugamos el sostenido crecimiento económico, la posibilidad de ser una sociedad próspera y saludable. En suma, nos jugamos lo que somos y lo que soñamos ser como país.

La sesión, en videoconferencia, contó con la participación de Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, así como de Marcos Bucio, subsecretario de Educación Pública, quien anunció que emitirá la política nacional de educación inicial.

En el encuentro se manifestó que los más pequeños forman parte del grupo con mayor pobreza y acumulación de carencia social, incluso desde el vientre materno.

Al respecto, el titular del Sipinna, Ricardo Bucio, expresó que en este grupo poblacional, tres de cada cuatro vive con al menos una carencia social.

Sánchez Cordero señaló que este gobierno entiende el enorme costo social de no atender desde hoy a la primera infancia; tenemos la responsabilidad ética, pero también la convicción política y la obligación legal de atender lo importante y no trabajar sólo por lo urgente.

Por ello, añadió, la primera infancia debe estar por encima de todos los legítimos asuntos, por encima de cualquier interés político o partidario. Les notificó que está en proceso la expedición de la cédula de identidad para menores de edad, la cual no será una credencial sino un instrumento digital.

La funcionaria comentó, además, que dado el actual contexto en materia de salud y de educación, se observará un impacto en el desarrollo síquico y emocional de los menores.