Birmingham. La policía de Birmingham, segunda ciudad más importante de Gran Bretaña, se lanzó ayer a la búsqueda y captura de un hombre que perpetró un apuñalamiento múltiple que dejó como saldo un muerto y dos heridos graves.

Otras cinco personas sufrieron lesiones leves. El ataque duró varias horas y tuvo como escenario cuatro lugares en el concurrido centro de Birmingham, entre la medianoche del sábado y las 2 y media de la madrugada de ayer.

Steve Graham, uno de los investigadores, declaró en conferencia de prensa: Buscamos a un sospechoso y las investigaciones para identificarlo continúan.

Según los primeros elementos de la investigación abierta por homicidio, nada permite pensar por el momento en la hipótesis terrorista o la de un crimen de odio, sino más bien que se trataría de un conflicto entre pandillas, explicó Graham.

Sin embargo, ninguna de las víctimas tenía relación alguna con pandillas, y las personas agredidas parecen haber sido víctimas al azar, precisó el agente investigador.

En el lugar del ataque, en torno al Arcadian Center, un complejo de bares, restaurantes y centros nocturnos, permanecía ayer un fuerte dispositivo policial.

El primer ministro británico, Boris Johnson, dedicó todos sus pensamientos a las víctimas y expresó su agradecimiento a los servicios de auxilio.

Cara Curran, de 18 años, quien trabaja en la zona, dice que hubo mucha tensión la noche del sábado. “No eran las peleas habituales de una o dos personas. Eran grupos de 15 o más. La gente salía de los bares para ver qué pasaba, relata.

La joven asegura haber escuchado insultos raciales, pese a que se trata de un lugar que siempre ha sido visitado por personas de múltiples rasgos y culturas.

Algunos testigos afirmaron en Twitter haber escuchado disparos, pero la policía dijo que no había información sobre ello hasta el momento.

Birmingham, de un millón de habitantes, es una de las ciudades más cosmopolitas de Reino Unido. Hace algunos años estuvo marcada por una explosión de violencia entre pandillas.

En enero de 2003, uno de esos grupos abrió fuego con un arma semiautomática contra un grupo rival y dos adolescentes murieron.

El pasado 20 de junio, tres hombres fueron asesinados con un cuchillo en un parque de Reading, ciudad ubicada al oeste de Londres. La investigación está en manos de la policía antiterrorista.

El sospechoso de dicho ataque, Khairi Saadallah, un refugiado libio de 25 años, fue acusado de tres asesinatos y tres intentos de homicidio. Según su familia, sufría problemas mentales debido a la guerra civil en Libia.

El ataque no fue reivindicado.

Seis días después, un hombre apuñaló e hirió a seis personas en un hotel que albergaba a refugiados en Glasgow, Escocia, pero se descartó el terrorismo.

Sin cambios desde noviembre de 2019, el nivel de amenaza terrorista en Reino Unido está en el tercer grado de una escala de cinco.