Las empresas farmacéuticas más grandes del mundo han perdido impulso en su escalada en el mercado de valores como consecuencia de los resultados inciertos en sus esfuerzos por crear una cura contra el Covid-19, sobre todo en un contexto en que hay visos del inicio de una segunda ola de la pandemia.

A mediados de año compañías como Moderna, Pfizer, Biontech, AstraZeneca, Novavax y Johnson & Johnson, registraron un exponencial aumento en su valor de mercado ante la expectativa de los inversionistas de que alguna de ellas sería la ganadora en la carrera por encontrar la cura contra el virus que llevó al planeta al confinamiento.

Aunque las farmacéuticas mantienen sus importantes crecimientos, éstos se han detenido, entre otras razones, por múltiples noticias negativas alrededor de sus respectivas vacunas.

Por ejemplo, a inicios de septiembre AstraZeneca y la Universidad de Oxford interrumpieron sus pruebas luego de identificar un caso de reacción adversa en un voluntario que se aplicó la vacuna, lo que alertó a los inversionistas, pues dicha mancuerna era la más avanzada en la labor de encontrar una cura.

A comienzos de 2020 las acciones de AstraZeneca en la Bolsa de Nueva York se ubicaban en 52 dólares, pero conforme avanzaban sus estudios escalaron a 57 dólares, lo que representó un incrementó de aproximadamente 6 mil 500 millones de dólares en su valor de mercado al colocarlo en 75 mil 980 millones.

No obstante, aquel acontecimiento negativo en sus pruebas no sólo frenó el crecimiento en el precio de sus acciones, sino que cayó a 54 dólares.

Otro caso es el del gigante J&J, que luego de que el costo de sus acciones pasara rápidamente de 133 a 146 dólares, propiciando un incremento de 36 mil 600 millones de dólares en su valor de mercado, lleva más de un mes estancada en ese nivel.

No obstante, el fin de semana se anunció que su vacuna ha mostrado reacciones positivas en los pacientes, lo que puede animar a los inversionistas.

En el caso de Moderna, farmacéutica que había causado gran expectativa luego de que sus acciones se dispararán 150 por ciento al pasar de 30 a 77 dólares, la euforia se fue apagando luego de que fuera anunciando retrasos en sus estudios, al grado de que desde entonces su títulos han caído a 69 dólares.

Biontech, socia de Moderna, ha corrido con la misma suerte: sus acciones subieron 26 por ciento al avanzar de 62 a 84 dólares, pero ahora se ubican en 66 dólares.