Morelia, Mich., Decenas de mujeres se manifestaron ayer en las ciudades de Uruapan, Huetamo y Apatzingán para exigir el esclarecimiento del homicidio de Jessica González Villaseñor, cometido el 21 de septiembre.

En Morelia, capital del estado, se llevó a cabo el funeral de la joven educadora de 21 años; la misa fue virtual y sólo acudieron a la capilla de Gayosso unas 30 personas.

Cuando Jessica salió de su casa, ubicada en la colonia Mártires de la Plaza, en Morelia; dijo que se reuniría con un amigo, pero no se supo más de ella, por lo cual la Fiscalía estatal activó la Alerta Alba.

Ayer por la mañana en Uruapan, mujeres y algunos hombres salieron a la calle en demanda del arresto del principal sospechoso, Diego M, que supuestamente es parte de una familia de políticos del municipio de Lázaro Cárdenas.

Los más de 300 manifestantes repudiaron una vez más que en el estado se mate a las mujeres en la cara de la gente. En Michoacán han sido asesinadas 750 mujeres en los últimos cinco años.

En tanto, feministas de las ciudades de Huetamo y Apatzingán también protestaron y recordaron que en esta entidad ha crecido el número de feminicidios y que sólo en este año van 155, según cifras oficiales.

Las activistas aseguraron que en los meses recientes la violencia ha crecido y mencionaron los asesinatos de Guadalupe Campanur, ambientalista, y Nilda Rosario, estudiante universitaria, ambas ultimadas por sus ex parejas.

La ceremonia fúnebre de Jessica se transmitió en redes sociales. Las autoridades de Michoacán pidieron a las personas que apoyan a la familia de la joven no intervenir en las investigaciones, porque se difundió la foto del sospechoso del crimen a fin de pedir ayuda para localizarlo. Las autoridades argumentan que tratar de hacer justicia en contra de una persona no juzgada podría ocasionar otra desgracia.