En su época de amateur venció al pelirrojo
Miércoles 30 de septiembre de 2020, p. a11
En el boxeo también existe el destino de la derrota. El peleador al que llaman underdog, por ejemplo, es una figura sin posibilidad de victorias y que eligen para que otros luzcan o aumenten sus historiales. Una carrera construida para el fracaso. Mario Cázares, con apenas 12 peleas y 30 años a cuestas, cree que sucedió algo parecido la noche del viernes. El pugilista casi anónimo sospecha que lo buscaron porque querían un rival que no pegara y permitiera a Julio César Chávez júnior tener una noche de esplendor en la función junto a su legendario padre.
Ese, sin embargo, no era su caso. El bajacaliforniano Cázares no sólo derrotó al hijo de Chávez, además las consecuencias anímicas lo hacen visualizar un futuro de grandes oportunidades. Ahora insiste que puede enfrentar a Saúl Canelo Álvarez, a quien derrotó cuando eran casi unos adolescentes aficionados, pero que hoy para muchos resulta más que improbable.
“El Junior y su papá todavía están llorando por la derrota”, suelta Cázares con malicia; me hicieron subir a 175 libras, cuando soy un 168 natural. Tuve que tomar demasiados líquidos para dar el peso. En la noche durante la pelea ya me llevaba muchos kilos de ventaja; aún así le pegué y si me lo dejan un poco más lo noqueo
.
La contienda fue complicada, con choques de cabeza y puntos descontados en su contra. A pesar de lo turbio del combate, insiste que el golpe que abrió el párpado del Junior –razón por la cual detuvieron la pelea para decidirlo por las tarjetas que dieron el triunfo–, fue producto de un golpe y no un cabezazo.
“Fue un upper limpio”, sostiene; deberían tener valor los Chávez y reconocer su derrota
.
Cázares está convencido de que esa victoria lo colocó en una élite donde puede pensar en enfrentar a la estrella mundial Canelo Álvarez. Eddy Reynoso, entrenador del pelirrojo, publicó un mensaje en redes sociales donde dijo que esa aspiración causaba pena ajena
. El bajacaliforniano no se intimida.
En el equipo del Saúl tienen miedo de enfrentarnos otra vez
, desafía Cázares; ya lo dejé llorando en el ring cuando peleamos como amateurs, pero esta vez le voy a tumbar todas las pecas
.
Eso fue hace más de 15 años, en una Olimpiada Nacional. El Canelo era un jovencito muy distinto a la figura internacional bien consolidada de la actualidad. Cázares advierte que también él es otro peleador.
“No es un desafío ganarle al Canelo”, dice sobrado; “ Volver a vencerlo está fácil, tanto como la tabla del cero… bueno, creo que ya me estoy emocionando”.
Aunque de pronto hace un esfuerzo por parecer sensato en sus aspiraciones, y no sólo un peleador movido por la euforia de una victoria inesperada, comenta que, después del triunfo ante Chávez, su representante ha recibido varias ofertas.
Se va a hacer la pelea con Álvarez, los voy sorprender
, advierte; “voy a dejar en evidencia al verdadero Canelo. Eddy Reynoso dice que Chávez tuvo su peor versión conmigo. Pero todos saben que eso ocurrió cuando peleó contra Saúl... a pesar de que esa noche el Junior subió como un cadáver, no lo noquearon”.