Marchan cientos en Tlapa
Denuncian colusión entre autoridades y criminales
Lunes 12 de octubre de 2020, p. 29
Chilpancingo, Gro., Cientos de personas marcharon ayer en la ciudad de Tlapa de Comonfort, en la región de la Montaña Alta de Guerrero, al cumplirse un año de la desaparición y asesinato de Arnulfo Cerón Soriano, defensor de los derechos humanos y de los pueblos indígenas, así como dirigente del Frente Popular de la Montaña (FPM).
El Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan demandó que el crimen no quede impune y que los responsables materiales e intelectuales sean sancionados con todo el peso de la ley; se repare el daño y se apliquen medidas de no repetición, pero sobre todo, que se generen condiciones para que los defensores de derechos humanos tengan garantías para realizar su labor
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En la protesta participaron unos 500 ciudadanos provenientes de distintas comunidades de la región, así como miembros del FPM, que Cerón Soriano fundó junto con otros dirigentes populares.
Después de recorrer las principales calles de Tlapa realizaron un mitin en el que Abel Barrera, director de Tlachinollan, habló de la tragedia que precedió a la lucha de Arnulfo Cerón en defensa de los derechos humanos.
Recordó que su padre, Agripino Cerón, y su hermano, Gonzalo Cerón, fueron asesinados en el municipio de Cualac en 1985, cuando fueron a comprar marranos, porque se dedicaban al comercio
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Desde ese momento, siendo Arnulfo un niño, comenzó a vivir situaciones complicadas. Entonces vivían en el poblado de Zacualpan, municipio de Tlapa; cursó la primaria en escuelas de los municipios de Olinalá y de Cualac
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Luego, a fin de buscar mejores condiciones de vida, se trasladaron al poblado de Coayahualco, municipio de Huamuxtitlán. Ahí tenía que cruzar un río para ir a la secundaria y luego al bachillerato, porque no había puente; Arnulfo tenía 18 años y lo contrataban en los cultivos de arroz porque era muy bueno
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Posteriormente Arnulfo y su familia llegaron a Tlapa y él se fue a estudiar a la Escuela de Derecho de la Universidad Autónoma de Guerrero, donde se recibió de abogado
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En un comunicado, Tlachinollan recordó que la noche del 11 de octubre de 2019, el defensor indígena salió de su casa rumbo a una reunión y no regresó. Las primeras investigaciones concluyeron que alguien conocido lo citó a la orilla de Tlapa
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El organismo responsabilizó de la desaparición del activista a la delincuencia organizada en connivencia con autoridades municipales. Arnulfo fue llevado a una casa de seguridad. Allí lo interrogaron, lo torturaron y lo asfixiaron. Los perpetradores le reprochaban su constante activismo en marchas y bloqueos contra el ayuntamiento de Tlapa y su renuencia a abandonar el movimiento pese a haber sido advertido de las consecuencias que ello traería
, aseveró.
Testigos de la agresión revelaron “que el defensor (Arnulfo Cerón) pidió al interrogador darle otra oportunidad, pero éste le respondió que ya era tarde, que eso lo hubiese pensado antes.
Lo asesinaron y metieron en la cajuela de un vehículo, el cual circuló por la ciudad con apoyo de policías municipales, y fue llevado a las orillas, donde una máquina retroexcavadora ya había cavado una fosa de tres metros de profundidad. La idea era que nunca lo encontraran
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Personal de la Comisión Nacional de Búsqueda y de la fiscalía estatal realizaron búsquedas y el 20 de noviembre de 2019 localizaron su cadáver en el punto conocido como Los Tres Postes, en la carretera Tlapa-Metlatónoc, tramo Igualita.
Varios autores materiales y algunos intelectuales están siendo procesados por el artero crimen. Aunque el proceso tiene algunos avances, falta que los culpables sean sentenciados
, concluyó.