El conflicto en Chihuahua acerca del agua se le fue de las manos al gobierno estatal y a pesar de las provocaciones, la Federación no utilizará la fuerza pública para desalojar a la gente que participa en las protestas en esa entidad, aseguró el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Señaló que manipularon y alentaron con fines electorales, con la bandera de la defensa del agua –ante el tratado internacional de 1944 con Estados Unidos–, estrategia permitida por las autoridades estatales y municipales de la región, con el fin de provocar el uso de la fuerza pública y que “haya violencia.

Es muy curioso, están pidiendo que salga la Guardia Nacional de Chihuahua, las autoridades de Chihuahua y los grupos de intereses creados, y por el otro lado quieren que se desaloje a los que están tomando las vías con la Guardia Nacional. Nosotros no podemos hacer eso, subrayó.

Al contrario, sostuvo, se cumplirá con Estados Unidos para evitar un conflicto internacional.

En conferencia de prensa, manifestó que a las autoridades estatales esto se les está complicando, porque es relativamente fácil iniciar un movimiento; lo difícil es resolverlo y levantarlo. Ahora no puede, se les fue de las manos y nosotros no vamos a ir con la fuerza pública a reprimir al pueblo, reiteró.

Al ser interrogado acerca del bloqueo de las vías del ferrocarril en la estación Consuelo, en el municipio de Meoqui, manifestó que es un asunto del estado, de un partido y un candidato a gobernador, en referencia al panista Gustavo Madero, quien “aparece en todos los actos.

Ellos iniciaron esto, ellos tienen que buscar la solución; ni modo que nosotros utilicemos la fuerza para desalojar a la gente, agregó.

Por la noche, tras una reunión en la Secretaría de Gobernación (SG) entre dirigentes de la Asociación de Usuarios de Riego del Estado de Chihuahua con funcionarios y legisladores federales y locales, se informó que el gobierno federal ofreció una mesa técnica con el fin de analizar la situación hidráulica de la entidad y se pidió a los representantes de los distritos de riego el cumplimiento del acuerdo de aguas con Estados Unidos.

Se acordó que el pliego de peticiones presentado por los representantes de los módulos de riego se revisará y después se instalará una mesa técnica de trabajos para revisar la infraestructura hidráulica y atender necesidades de inversión, informó la Secretaría de Gobernación.

Por otra parte, a 10 días de que concluya el ciclo de entrega de agua a Estados Unidos en el contexto del tratado internacional, faltan por enviarse del río Bravo a ese país 231 millones de metros cúbicos, 53 por ciento de lo correspondiente a un año, informó la Comisión Nacional del Agua.

El ciclo 35, que comenzó en 2015, termina el 24 de octubre y no debe terminar con déficit en la entrega de agua, debido a que el periodo anterior terminó ese año con un adeudo de 324 millones de metros cúbicos.