La familia LeBarón presentó ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) una petición con el fin de que dicho organismo exija al Estado mexicano que no utilice a las fuerzas armadas para reprimir a quienes se oponen al envío de agua de la presa La Boquilla a Estados Unidos y que garantice la estabilidad económica de las personas que se verían afectadas con esta decisión.

En conferencia de prensa virtual, el abogado Bryan Lechuga explicó que las medidas cautelares solicitadas al organismo interamericano buscan evitar mayores confrontaciones entre la Guardia Nacional y las personas que han manifestado su oposición a que México disponga del líquido de la presa de forma que ellas consideran equivocada.

No estamos en contra de cumplir el Tratado (de Aguas firmado con Estados Unidos en 1944), pero buscamos que México reflexione sobre sus prioridades, no afecte a los agricultores y busque soluciones en un clima de paz para evitar que haya casos como el de Jessica Silva, quien murió cuando regresaba a su casa tras participar en manifestaciones contra la toma de la presa, indicó Bryan Lebarón.

En tanto, el activista Raymundo Eugenio Soto advirtió sobre los riesgos de militarizar la seguridad pública y las instalaciones de la Comisión Nacional del Agua en esta región del estado de Chihuahua y lamentó que la falta de líquido puede llevar a muchos agricultores a emigrar a Estados Unidos por falta de garantías para la siembra, lo que generará desempleo y falta de actividad económica.