Vigilancia de la Semar obstruye la vía marítima
Domingo 18 de octubre de 2020, p. 5
Acciones de la Secretaría de Marina Armada de México (Semar), en colaboración con naciones de Centro y Sudamérica (como parte de la llamada Operación Orión), han ocasionado que los grupos delictivos disminuyan el envío de droga por vía marítima y ahora utilizan aeronaves viejas y en malas condiciones, por eso ha sido mayor el número de aviones o avionetas que se han venido a tierra con cargamentos de cocaína, como ha ocurrido en Chiapas y Quintana Roo en los últimos meses.
Funcionarios que participan en el Gabinete de Seguridad indicaron que el despliegue operativo de la Semar ha logrado, tan sólo en lo que va del año, tres decomisos de cocaína, cada uno de alrededor de 2 toneladas, y miles de litros de combustible y embarcaciones menores que realizan recorridos furtivos para abastecer de gasolina o diésel a las naves que recorren las aguas –principalmente– del Pacífico mexicano para tratar de llegar lo más cerca posible a puntos donde se resguarda droga, como Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Colima.
La Semar forma parte de la Campaña Naval Multinacional en contra del tráfico de drogas, denominada Operación Orión, en la que participan 25 naciones de América y Europa.
Hasta abril pasado, el intercambio de información e inteligencia dejó como resultado a escala internacional la incautación de más de 130 toneladas de cocaína, 15 de mariguana y 12 semisumergibles.
En el caso de México, en lo que va de este año la Semar ha incautado miles de kilogramos de cocaína; en una de las ocasiones fue un cargamento de 2 mil 240 kilos en costas de Acapulco el pasado 3 de agosto; el 2 de septiembre en costas de Quintana Roo fueron 2 mil 960 kilos y el 15 de octubre, en costas de Guerrero, 2 mil kilos de alcaloide.
La Operación Orión, en su quinta edición, inició formalmente el pasado 5 de abril, y en ella colaboran 25 naciones a través de 50 instituciones de Colombia, Estados Unidos, México, Guatemala, Costa Rica, Panamá, Honduras, El Salvador, Brasil, España, Francia y Bélgica, entre otras.
En cuanto al combustible decomisado en las costas nacionales, la Semar ha reportado más de 45 mil litros de gasolina que presuntamente sería empleada para abastecer a las lanchas rápidas con motores fuera de borda que son utilizadas por narcotraficantes.
Cercos marítimos
Los cercos marítimos también han tenido impacto en la búsqueda de esquemas que permitan el trasiego de drogas, por ello los grupos delictivos están utilizando aeronaves en malas condiciones y se han registrado desplomes de éstas.
Por ejemplo, el pasado 6 de octubre, en el municipio de Amealco, cayó un avión Cessna; en septiembre, un avión fue robado del aeropuerto de Cuernavaca y se precipitó a tierra en Guatemala; asimismo, en julio un avión con droga aterrizó de emergencia en una carretera de Quintana Roo.
Las fuentes consultadas refirieron que los narcotraficantes están tratando de ocultar sus naves cuando logran aterrizar y descargar su droga para intentar llegar nuevamente a Sudamérica, pero como en muchos casos no lo logran, ahora incendian los aviones una vez que aterrizan para que no los persigan o les quiten la carga.