Lunes 19 de octubre de 2020, p. 29
Bogotá. La minga (marcha) social, popular y comunitaria llegó ayer a Bogotá con la exigencia de un encuentro con el presidente de Colombia, Iván Duque, ante la grave situación de violencia que sufre el país, al tiempo que el mandatario advirtió que no negociará bajo amenazas.
En caravana, con banderas, carteles e instrumentos musicales, la gran movilización entró a esta capital para demandar también que sean respetados los derechos de las comunidades originarias y de toda Colombia.
La marcha que comenzó el pasado día 10 en defensa de la tierra, la vida y la paz, esperó en Cali la presencia de Duque, quien envió una comisión en su lugar, por lo que decidieron marchar a Bogotá.
En el Palacio de los Deportes de esta capital, niños, jóvenes y mujeres recibieron con un pabellón gigante y música a la caravana indígena del suroccidente.
A la entrada a la capital del país la movilización de cerca de 10 mil personas, fue recibida por una multitud en apoyo a sus reclamos.
Duque advirtió que está dispuesto a debatir con todos los sectores, siempre y cuando se haga por vías legítimas y no bajo amenazas.
Las reivindicaciones de la minga incluyen medidas ante la impunidad en los asesinatos de líderes sociales, así como la implementación del acuerdo de paz con las desarticuladas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia y actuaciones contra la violencia en general.
El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz ubica en 47 el número de indígenas asesinados en lo que va del año en Colombia, además de que van 267 víctimas en 67 matanzas. Desde 2016, cuando se firmaron los acuerdos de paz, han sido ultimados 269 líderes indígenas.