Viernes 23 de octubre de 2020, p. 25
Washington. Hackers patrocinados por Rusia han estado tratando de entrar en redes de computadoras de gobiernos estatales y locales de Estados Unidos y en dos casos tuvieron éxito, indicaron ayer agencias del gobierno estadunidense, en la segunda gran advertencia sobre interferencia extranjera en dos días.
A menos de dos semanas de que se realicen las elecciones, aumenta el temor de una posible manipulación que socave la confianza en los resultados del 3 de noviembre.
De acuerdo con las agencias, un grupo ruso, a veces llamado Berserk Bear o Dragonfly por los investigadores, atacaron docenas de gobiernos estatales, locales, tribales y territoriales de Estados Unidos, así como redes de aviación.
Al menos desde septiembre de 2020, un actor ruso patrocinado por el Estado ha llevado a cabo una campaña contra una amplia gama de objetivos estadunidenses
, dieron a conocer la FBI y el Departamento de Seguridad Nacional.
Los hackers se infiltraron con éxito en un número indeterminado de redes y, a principios de este mes habían robado datos de dos de ellas, aseguraron las agencias en una publicación en el sitio web de la Agencia de Seguridad Cibernética y de Infraestructura, brazo del Departamento de Seguridad Nacional.
Los nombres de los gobiernos objetivo no fueron revelados, y los funcionarios admiten que no tienen evidencia de que alguna operación electoral o gubernamental haya resultado afectada, o que la integridad de los datos electorales haya quedado en riesgo.
Muchos en Estados Unidos se han preocupado por una posible repetición de 2016, cuando hackers que supuestamente trabajaban para la inteligencia militar rusa robaron y liberaron correos electrónicos de destacados demócratas y otras figuras políticas, según agencias de inteligencia y funcionarios de Washington.
El director de Inteligencia Nacional de Estados Unidos, John Ratcliffe, sostuvo antier que tanto Rusia como Irán han tratado de interferir en las elecciones presidenciales de 2020, buscando socavar la confianza de los estadunidenses en la integridad del voto y difundir información errónea en un intento por influir en el resultado.
Rusia obtuvo información pública de los votantes e Irán les envió correos electrónicos falsos en un intento por intimidarlos y dañar al presidente Donald Trump, manifestó Ratcliffe.
Irán y Rusia rechazaron ayer las acusaciones sin fundamento
de Estados Unidos.
En Moscú, Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, denunció que las acusaciones llegan todos los días y son totalmente infundadas
.
Y en un foro de debate de Valdái, el presidente Vladimir Putin declaró: fortaleciendo nuestro país, mirando lo que está sucediendo en el mundo, quiero decirles a aquellos que todavía están esperando el debilitamiento gradual de Rusia, en este caso sólo nos preocupa una cosa: cómo no resfriarnos en su funeral
.
En Teherán, la cancillería iraní informó que convocó al embajador suizo, país que representa a Estados Unidos en Irán desde 1979. Las autoridades estadunidenses lanzaron acusaciones sin fundamento en vísperas de las elecciones para justificar el guion antidemocrático que ya tienen preparado
, dijo el portavoz Saeed Khatibzadeh.
Mientras, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó ayer a cinco entidades iraníes, entre ellas los Guardianes de la Revolución, por intentos descarados
de injerencia en las elecciones presidenciales de noviembre.