Los Ángeles. Joe Biden en pantalla partida con George Clooney; Kamala Harris en un juego online con los superhéroes de las películas de Marvel.

Las recaudaciones virtuales de fondos con figuras de Hollywood y los líderes demócratas han resultado en California en un flujo de donaciones sin precedentes en el estado más rico del país, considerado siempre una fuente de dinero para el partido.

A medida que avanza la carrera por la Casa Blanca, ambas campañas están montando giras vertiginosas por estados clave, y están notablemente ausentes en este estado liberal, donde Biden aventaja a Trump por más de 30 puntos.

Pero aunque los californianos ya no pueden influir en esta etapa de la carrera con su voto, los demócratas dicen que nunca han presenciado un auge tan extraordinario en la recaudación de fondos y el activismo de celebridades, incluso cuando la pandemia limita los actos a Internet.

Ha sido increíble. Mi bandeja de entrada está llena de correos electrónicos todos los días de personas de toda la industria del entretenimiento: del lado comercial, del lado creativo, de todas partes... música, películas, televisión, todo, dijo el estratega demócrata basado en Los Ángeles, Bill Carrick.

Guionistas, directores, actores, productores, agentes, todo ese mundo está aún más activo, agregó.

Estrellas como los elencos de Seinfeld, Happy Days y The West Wing han celebrado reuniones en línea.

Las entradas para participar en una charla de Hillary Clinton organizada en línea por Amy Schumer el miércoles ascendieron a 50 mil dólares, mientras que jóvenes activistas pagaron desde 50 dólares para asistir a una lectura virtual de Wet hot american summer, con Paul Rudd, Elizabeth Banks y otras estrellas de la película.

La pandemia creó la recaudación de fondos virtual en Zoom, principalmente, y estas tienen un gran éxito, mencionó Carrick. Todo ese tipo de cosas realmente ha explotado.

Steven Maviglio, un estratega con sede en Sacramento, cree que los dólares de recaudación de fondos de los demócratas de California son casi el doble de lo que eran hace cuatro años, una línea de base alta, dado el fuerte apoyo a Hillary Clinton en 2016.

California siempre ha sido vista como una especie de cajero automático, agregó. Pero este año, los candidatos realmente no han venido mucho aquí para hacer actos en persona. El dinero está llegando a ellos.