Madrid. El secretario de Estudios y Análisis Estratégicos del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Acción Nacional (PAN), Fernando Rodríguez Doval, se alió con la extrema derecha española de Vox –una formación política que actualmente es la tercera fuerza parlamentaria del país con un discurso xenófobo– para lanzar una especie de plataforma internacional que busca combatir a los gobiernos de inspiración comunista. El cónclave se alió en torno a un documento que denominaron Carta de Madrid, y que hasta el momento ha sido apoyado por 50 personas de América Latina, Estados Unidos, España y Portugal, todos ellos vinculados a movimientos de extrema derecha y con un discurso neofascista.

El que fuera vocero del ex candidato panista Ricardo Anaya, Rodríguez Doval, es el único líder mexicano que aparece en el listado de las firmas que suscriben el documento y que presentó el líder del partido Vox, Santiago Abascal, con la intención de aglutinar a los movimientos de su ideología ultra y con métodos populistas como los de Donald Trump y Jair Bolsonaro para hacer frente a los gobiernos que proclaman su defensa de la igualdad y la justicia desde una visión de izquierda.

Además de Rodríguez Doval, el documento también lo firma el actor mexicano afincado en Estados Unidos Eduardo Verástegui, asesor de la Iniciativa de la Casa Blanca para la Prosperidad Hispana y defensor de la política de Donald Trump. Además hay otros personajes de la derecha latinoamericana, sobre todo venezolana, como María Corina Machado, coordinadora nacional de Vente Venezuela; Antonio Ledezma, ex alcalde de Caracas; Alejandro Chaufen, director general internacional de The Acton Institute; José Antonio Kast, presidente del Partido Republicano de Chile, y la escritora cubana Zoé Valdés, entre otros.

En el documento se advierte que una parte de la región está secuestrada por regímenes totalitarios de inspiración comunista, apoyados por el narcotráfico y terceros países. Todos ellos, bajo el paraguas de Cuba e iniciativas como el Foro de Sao Paulo y el Grupo de Puebla, que se infiltran en los centros de poder para imponer su agenda ideológica.

Los firmantes del documento coinciden en que el avance del comunismo supone una seria amenaza para la prosperidad y el desarrollo de nuestras naciones, así como para las libertades y los derechos de nuestros compatriotas. En este sentido, señalan que el Estado de Derecho, el imperio de la ley, la separación de poderes, la libertad de expresión y la propiedad privada son elementos esenciales que garantizan el buen funcionamiento de nuestras sociedades, por lo que deben ser especialmente protegidos frente a aquellos que tratan de socavarlos.

La Carta de Madrid en realidad es el preámbulo para lo que aspiran a que se convierta en el Foro Madrid, que será como una coalición de líderes políticos y sociales que se unen en torno al combate del comunismo y los gobiernos de izquierda. En torno a la presentación de la Carta de Madrid, el propio Rodríguez Doval explicó que su presencia en el foro emergente se debe en parte a la situación que vive México desde la llegada al poder del actual Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador. El gobierno de López Obrador no se asume como jefe de Estado sino como jefe de una fracción que aspira a avasallar a todas las demás. En estos dos años se han dado pasos hacia un régimen profundamente autoritario. Hemos visto cómo el Presidente ha invadido a los otros poderes. Hoy ya tiene una mayoría afín en la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Ha capturado los órganos constitucionales autónomos, es un régimen profundamente ideológico que al igual que otros regímenes populistas polariza al país y crea divisiones, señaló el panista en el contexto de su alianza con la extrema derecha española, con la que incluso el partido conservador hegemónico en España, el Partido Popular (PP), decidió recientemente romper cualquier vínculo por su discurso de odio y crispación.