Mi literatura proviene de la vida, del suelo, de la tierra
Sábado 28 de noviembre de 2020, p. 3
La escritora portuguesa Lídia Jorge (Boliqueime, 1946) recibirá hoy el Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances 2020, en la inauguración del mayor encuentro editorial de habla hispana.
Mi literatura proviene de la vida; hay escritores cuyos libros vienen desde la erudición. También lo hago, pero mi escritura nace del suelo, de la tierra, del pueblo
, afirmó la autora de 74 años al recibir la noticia del reconocimiento, en agosto pasado, cuando el cielo cambió a color azul, púrpura y oro
. Dedicó el galardón a sus coetáneos José Saramago y Antonio Lobo Antunes.
En 1980 publicó O Dia dos Prodígios, su primera novela, considerada un acontecimiento literario que inauguró una nueva fase de la literatura portuguesa. Vivió tiempos convulsos de la guerra de independencia colonial en África; sus años de residencia en Angola y Mozambique entre 1968 y 1974 impregnaron su literatura. Ha publicado novela, cuento, libros infantiles, teatro, ensayo y poesía.
Su novela más reciente, Estuario (2018), es una interpretación de lo que ocurre en el mundo, como ha hecho en su trabajo actual, Misericordia, que prometió realizar cuando su madre murió víctima de Covid-19 en abril pasado.
La ceremonia a distancia
para entregar el premio se celebrará esta mañana a las 11 horas, en una transmisión en vivo. Lídia Jorge también participará en el ciclo Mil jóvenes con..., el lunes 30, al mediodía, y estará acompañada por Benito Taibo. El viernes 4 de diciembre, a las 13 horas, participará en el Encuentro Internacional de Cuentistas.
Durante la FIL también se entregará el Premio Sor Juana Inés de la Cruz 2020 a la escritora argentina Camila Sosa Villada por su novela Las malas (2019), otorgado por la gran destreza narrativa, la originalidad del ambiente y la fuerza de los personajes que retrata
. La ceremonia virtual será el 2 de diciembre.
Otros reconocimientos de la feria son el Premio de Literatura Ciudad y Naturaleza José Emilio Pacheco para el poeta mexicano Marco Antonio Murillo, por su poemario Tal vez el crecimiento de un jardín sea la única forma que los muertos pueden hablarnos, el Premio Iberoamericano SM de Literatura Infantil y Juvenil para la colombiana Yolanda Reyes y el Premio de Literaturas Indígenas de América a la poeta Juana Karen Peñate Montejo.