A pesar del impacto de la pandemia de Covid-19 en el sector inmobiliario, el interés por adquirir alguna propiedad en el sureste del país no ha cesado, de acuerdo con la plataforma digital Lamudi.

Datos de esa empresa señalan que la Riviera Maya destaca por el grado de interés que existe para comprar alguna propiedad.

Hay pronósticos de crecimiento en el sureste por la construcción del Tren Maya, el aeropuerto de Tulum, el puente Lagunar y el Canal de Zaragoza; la inversión no se ha dejado de dar, dijo Daniel Narváez, vicepresidente de marketing en Lamudi.

El directivo recalcó que los inversionistas están interesados en adquirir terrenos. En ese sentido, la plataforma digital expuso que en Cancún los consumidores prefieren propiedades con un costo de entre 2 y 4 millones de pesos.

Sin embargo, las personas que buscan adquirir una propiedad en Playa del Carmen optan por inmuebles cuyo valor oscile entre los 3 y 7 millones de pesos.

La mayor participación en la oferta corresponden a los segmentos interés medio con 39 por ciento y el residencial con 29 por ciento, seguido del social con el 14 por ciento, el residencial plus con una participación de 13 por ciento, mientras el premium sólo tiene una participación de 4 por ciento.

El mercado ha mejorado de manera paulatina, hay buenas perspectivas para finales de este año y principios de 2021, aunque no se ha regresado al promedio de ventas del año pasado, pero hay ligeras mejoras de entre 2 y 5 por ciento, apuntó Narváez.

Búsqueda por Internet

La búsqueda de inmuebles por Internet en Quintana Roo se ha desacelerado entre enero y noviembre de este año respecto de 2019, mientras las búsquedas de propiedades en Yucatán se han incrementado 7.9 por ciento, lo cual coincide con el nombramiento de Mérida como una de las ciudades más seguras del mundo para vivir.

Lamudi destacó que los inversionistas extranjeros ven a México como un mercado atractivo para el retiro e inversión debido a factores como la relación costo-beneficio que no tendrían en sus países de origen.

En ese sentido, acotó que en el territorio mexicano los costos son más bajos para la adquisición del subsector residencial, es decir, la compra de casas y departamentos.