Miles de personas dedicadas a la danza resultaron desempleadas este año debido a la pandemia. Lamentablemente, cerraron las academias que no tenían cómo pagar la renta y varios grupos artísticos se quedaron sin empleo.

En entrevista con La Jornada, Erandi Fajardo, integrante del Consejo Nacional de Danza, creado en 2018 a partir de un diagnóstico sobre la situación de esa manifestación artística en el país, explicó que la crisis del sector de la cultura, del cual la danza forma parte, obedece a la falta de una estrategia económica nacional.

Afirmó que durante todo este tiempo los creadores vivieron en la incertidumbre y que era el momento de pensar en una estrategia nacional; sin embargo, las autoridades sólo lanzaron programas que aminoraron la situación, pero no se solucionó el problema.

Fajardo expresó su preocupación porque la Secretaría de Cultura (SC)no cuente con un plan económico aparte de generar apoyos, porque la crisis continuará el próximo año. Explicó que la ayuda de recursos o pequeñas becas no fue suficiente, pues es necesario “articular una estrategia con los programas de bienestar social, con la secretarías del Trabajo y Salud, para tener una atención más que hacia la producción artística, una atención social para los trabajadores del arte.

Valoramos mucho los apoyos y las respuestas favorables de los estados, que en algunos casos fue muy simbólico; los apoyos ayudaron a aminorar una situación, pero no la resuelven. A quien obtuvo una beca para producir un taller en línea le resolvió la situación un mes, pero llevamos todo este tiempo sin ingresos, sin empleo.

Fajardo recordó que una de sus primeras demandas cuando el consejo lanzó la campaña de reactivación económica de la danza en México fue la de acceder a programas sociales del gobierno federal y estatal, porque parece que a los artistas hay que darles sólo becas o ciertos estímulos, pero al sector en general se le da apoyos de financiamiento, de salud, incluso despensas, pero ahí el concepto o el sector cultura no aparece y quedamos rezagados de muchos apoyos.

Explicó que se llegó a un acuerdo con la Secretaría de Cultura federal para que sirviera de puente en la integración del sector cultural a los programas sociales y de activación económica de las secretarías de Bienestar, Trabajo y Previsión Social, y Economía.

Sin embargo, de mil 275 hacedores de la danza que solicitaron ser integrados en el proceso de selección de los programas de la Secretaría de Bienestar, sólo 177 fueron contactados, excluyendo a 86 por ciento de los solicitantes.

Según Fajardo, la SC dejó las solicitudes de esos artistas de la danza sin darles respuesta, además de que no han contestado los correos en los que piden reunirse.

En opinión de la entrevistada, las convocatorias de apoyo para los creadores no son adecuadas a la realidad ni al momento que se vive por la pandemia de Covid-19, pues más allá de beneficiar a lo mejor de México se debe pensar en que todos tienen derecho a un apoyo para mejorar su producción.

Para Erandi Fajardo, es bueno contar con los apoyos a los espacios independientes, que antes no había sucedido; sin embargo, consideró que los apoyos tendrían que ser para articular equipos de trabajo, porque se da empleo a perfiles mixtos, y no sólo beneficia la producción de una obra.

Adelantó que en marzo del año próximo se llevará a cabo el segundo Congreso Nacional de Danza, cuyo tema central será La reactivación económica y la generación de empleos.