Jueves 31 de diciembre de 2020, p. 4
El director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo, emitió una carta al cuerpo directivo y normativo en la que llama a evitar que existan gandallas
en el plan de vacunación contra el Covid-19, y garantizar que en esta primera etapa se inmunice al personal de salud que se encuentra en la primera línea de batalla contra el virus. Debemos garantizar que nadie se salte la fila
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En videconferencia reconoció que se han tenido denuncias sobre presuntas irregularidades para recibir el biólogico, y enfatizó que “debemos garantizar que nadie se salte la fila, que no haya gandallas, que no haya influyentismo, ya han llegado algunas denuncias y las estamos investigando”.
Enfatizó que nadie que no sea personal de salud atendiendo Covid-19 en la primera línea debe de ser vacunado en esta primera etapa. Nadie, incluye a nivel central, y empieza conmigo mismo, con mi familia y con mis más cercanos colaboradores
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En tanto, Manuel Cervantes Ocampo, coordinador de atención integral a la salud en primer nivel, detalló que hasta la fecha se ha vacunado a 7 mil 728 trabajadores que laboran en la primera línea de atención a la pandemia en el IMSS, quienes han sido inmunizados en Coahuila, Ciudad de México, Nuevo León, Querétaro y Toluca.
Reacciones leves
También detalló que se han presentado 22 casos de reacciones leves a la vacuna, como dolor de cabeza, mareo y palpitaciones, y sólo un caso se clasificó como grave, aunque únicamente requirió aplicación intravenosa de un antihistamínico, un medicamento para poder quitar la alergia que estaba produciendo, sin ningún problema por el momento. Son eventos atribuibles a la vacunación que eran esperados
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Robledo enfatizó que de acuerdo con el calendario de entrega de la vacuna de Pfizer-BioNtech, se prevé que a finales de enero se haya concluido con la vacunación de todo el personal de salud que ha estado en la primera línea de atención de pacientes Covid
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Víctor Hugo Borja, director de Prestaciones Médicas del IMSS, destacó que la saturación de camas en la Ciudad de México es de 92 por ciento, y en el estado de México de 98 por ciento, mientras Hidalgo y Querétaro también presentan una elevada tasa de ocupación.