Cientos de personas vivieron un viacrucis para llegar a sus empleos, citas de trabajo, surtir su negocio o realizar pagos ante el cierre de 99 estaciones del Metro por el incendio ocurrido en la subestación eléctrica de Buen Tono el sábado pasado.

El servicio emergente desplegado para remplazar el servicio de las líneas 1, 2, 3, 4, 5 y 6 con mil 864 unidades de transporte público, concesionado, del estado de México y de la Secretaría de Seguridad Ciudadana fueron insuficientes para atender la demanda.

Usuarios esperaron hasta una hora para ingresar a los vehículos, donde la sana distancia no existió al ir al tope de su capacidad, registrándose los mayores problemas en Pantitlán, Indios Verdes y Cuatro Caminos por la gran cantidad de gente del estado de México.

A la desorientación de los usuarios, que también se presentó en Zaragoza, Tacubaya, San Lázaro, Chabacano, Centro Médico y Zapata, donde hubo una gran afluencia, se sumó la falta de unidades y diferencias en la programación y operación de los diversos servicios.

El secretario de Movilidad, Andrés Lajous, comentó que los tiempos alargados de espera en Cuatro Caminos, por ejemplo, fueron hasta de 40 minutos a las 9 horas, aunque con la reasignación de unidades se redujo a 20 y 10 minutos.

Señaló que con el envío de unidades vacías a puntos de saturación se buscó balancear la oferta, medida que continuará este martes; mientras, Cuatro Caminos se convertirá en estación nodal con atención especial.

Además, se mantendrá la modificación de recorridos de la empresa Cotxsa, que presta servicio sobre calzada de Tlalpan, para que sus autobuses lleguen de Tasqueña a Cuatro Caminos e ingresen al Centro Histórico; y el Metrobús habilitó un recorrido de San Lázaro a la Diana.

El recorte de la línea 3 del Metrobús de Zapata a Centro Médico, sin embargo, provocó que la gente buscara otro medio de transporte para llegar a su destino, lo que le significó más tiempo y dinero; mientras, el Mexibús amplió su servicio hasta la estación Buenavista.

Pasajeros señalaron que sus recorridos se incrementaron más de dos horas y media, el doble de tiempo que invierten normalmente, porque somos muchos y no hay camiones, y ni con los de la policía la hacemos, y eso que estamos en semáforo rojo por el Covid-19.

La policía capitalina informó que sus 85 camiones y 21 vehículos costeros, que modificaron su ruta para llegar a Hidalgo en lugar de a Balderas, habían realizado a las 14 horas 225 recorridos, apoyando a 8 mil 65 personas.