Sábado 10 de abril de 2021, p. 26
Un hombre murió y dos más se encuentran desaparecidos al derrumbarse la ladera de un cerro ubicado en el poblado Huixtlahuacan, colonia San Bartolo Ameyalco, alcaldía Álvaro Obregón, por lo que ya entrada la noche personal de servicios de emergencia realizaba trabajos de rescate.
Según los habitantes, la barranca de Axoyapan comenzó a ser habitada desde hace 12 años, luego de que un grupo de invasores taló árboles, cortó el cerro y vendió más de 300 lotes que las familias iban pagando como podían con lo que tenían
.
Aseguraron que en su momento hicieron las denuncias correspondientes ante la Secretaría de Medio Ambiente, cuyo personal acudió a inspeccionar, pero fue sacado a punta de pistola por los integrantes de esa banda liderada por quienes identifican como Antonio, Felipe y Valentín, a los cuales vinculan con la delincuencia organizada.
Según los vecinos, había tres trabajadores que excavaban una zanja de 1.70 metros de profundidad y 2.50 metros de ancho, cuando ocurrió el incidente a las 16:35 horas.
José Piña, director de Protección Civil de la alcaldía Álvaro Obregón, señaló que se trata de tres trabajadores de la construcción contratados por una persona para realizar una obra, al parecer un muro de contención.
El funcionario confirmó que se trata de un asentamiento irregular en un área de valor ambiental, donde a pesar de que se ha hecho un trabajo intenso para que la gente no construya por ser una zona inestable, siguen las obras. Cuando un trabajador hace un corte del talud sin ninguna metodología o procedimiento constructivo ocurren estas tragedias
.
La alcaldía viene y hace las suspensiones
, y aunque la obra no contaba con ningún permiso y es evidentemente ilegal porque está en un área de valor ambiental.
Aseguró que no hay riesgo para los inmuebles colindantes, pero las labores de rescate se han complicado porque se tiene que apuntalar el talud, que sigue inestable, para no exponer a quienes buscan a los trabajadores atrapados.
En el sitio se encontraban bomberos, personal de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil y alrededor de 20 policías que resguardan la zona ante la eventualidad de un nuevo derrumbe.