▲ El templo mortuorio del faraón Ramsés III (1186-1155 aC), de la dinastía XX, es uno de los monumentos funerarios más impresionantes de Luxor, Egipto, donde recientemente un equipo de arqueólogos encontró una gran ciudad perdida. El pórtico del recinto (en imagen) posee múltiples inscripciones.Foto Afp
Periódico La Jornada Martes 13 de abril de 2021, p. 4