Viernes 16 de abril de 2021, p. 8
Hombre, ¡qué final!
Eso es probablemente lo que oiríamos a todo el mundo decir al salir del multicine después de ver Promising Young Woman (Hermosa venganza), si todavía fuéramos al multicine. En una película audaz y provocativa (nominada a cinco premios Óscar), no hay nada más audaz y provocativo que su acto final, en el que la ex estudiante de medicina Cassie (Carey Mulligan) precisa una forma de venganza única.
Pero aunque algunos califican la cinta como una comedia negra, el final no tiene nada de gracioso: es brutal y se siente muy real. La guionista y directora Emerald Fennell dice que no estaba interesada en un final de cómic. Nadie saca un rifle de asalto para eliminar a los malos. De hecho, los malos tienden a hacerse pasar por buenos.
Fennell, nominada tanto a mejor dirección, como a mejor guion original por lo que sorprendentemente es su ópera prima, dice que su primer borrador del final era aún más crudo y sombrío
de lo que vemos en pantalla.
Consentimiento sexual
Fennell y Mulligan conversaron recientemente vía Zoom sobre su película, el gratificante reconocimiento que han recibido y ese final desgarrador (no hay spoilers específicos aquí, pero si aún no ha visto la cinta, cuidado de todas maneras). También expresaron su esperanza de que el filme ayude a crear conciencia entre los jóvenes sobre el consentimiento sexual. (De hecho, Focus Features y RAINN, el grupo contra la violencia sexual, anunciaron esta semana que se asociarán con Campus Circle para realizar proyecciones virtuales gratuitas de Promising Young Woman para estudiantes universitarios).
La entrevista fue editada para mayor claridad y brevedad.
Ap: Emerald (Fennell), éste es tu primer largometraje. ¿Imaginaste alguna vez que obtendrías tanto reconocimiento?
Fennell: Creo que tendrías que ser un monstruo megalómano para llegar a pensar que serías nominado a los Premios de la Academia. No. Lo importante para nosotros era terminarla porque teníamos un tiempo de rodaje muy corto (23 días), y yo estaba embarazada. Así que esto ha sido extraordinario.
Ap: Carey (Mulligan), hace una década fuiste nominada a un Óscar por An Education (Enseñanza de vida). ¿Cómo han cambiado las cosas para ti desde entonces?
Mulligan: Eso cambió mi carrera cuando sucedió, pero la experiencia fue bastante abrumadora. La encontré estresante y me sentí como una impostora. Esta vez, estoy decidida a pasar un buen rato porque es sencillamente increíble.
Ap: Bueno, sobre ese final, Emerald (Fennell), ¿tenías diferentes versiones en mente cuando empezaste?
Fennell: En teoría, había muchas versiones del final que pudieron haber pasado. Lo primero que entregué era mucho más duro, diría yo, y mucho más sombrío. Ciertamente, nunca hubo un final escrito en el que ella le cortara a todos sus partes íntimas y se alejaba con un cigarrillo en cámara lenta. El final que queremos, no es posible. Ese es el objetivo de la película, en realidad.
Ap: Carey (Mulligan), ¿cómo fue la experiencia en el set durante la escena más difícil?
Mulligan: Vimos a un equipo de dobles hacerlo primero, todos nos quedamos ahí parados haciendo muecas de dolor. Y tuvimos un breve percance en el que salió mal. Pensé: Bueno, probablemente pueda escapar de esto
. Entonces me di cuenta de que no podía. Teníamos una especie de símbolo especial o algo así. Hice la seña del pulgar abajo y después salí de ahí y perdí el control por completo, no podía parar de llorar.
Fennell: Teníamos que ser extra cautelosos, porque si algo salía mal no íbamos a saberlo hasta que fuera demasiado tarde. Así que fue una de esas cosas que a primera vista tal vez no parecía una maniobra increíblemente peligrosa, pero lo era.