Opinión
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El Correo Ilustrado

Un agradecimiento y una precisión

L

as integrantes de El Gallinero, Escena con Humor, queremos agradecer a La Jornada y a la reportera Alondra Flores la valiosa nota y espacio de difusión para nuestro proyecto ULTRAMAREADAS, Espectáculo Clown para sacar provecho al desecho, publicada el pasado 14 de junio 2021. 

Únicamente queremos hacer una precisión: las funciones son realizadas gracias al Sistema de Apoyos a la Creación y Proyectos Culturales, del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca).

Como artistas nunca podremos reconocer lo suficiente a estos programas culturales que impulsan la creación de proyectos, así como a medios de comunicación, entre ellos La Jornada, por creer y compartir nuestras historias con sus lectores.

Gracias por seguir dando espacios a la cultura.

El Gallinero Teatro

Reprueba al gobierno de Macri por envío de material bélico a Bolivia

Mientras el gobierno México, del Presidente Andrés Manuel López Obrador, a través de un rescate aéreo y, posteriormente ya en el poder político el presidente argentino Alberto Fernández, a través del asilo, salvaban la vida del destituido presidente de Bolivia Evo Morales, el régimen cipayo, mafioso, oligárquico y proimperialista de Mauricio Macri enviaba el 12 de noviembre de 2019, a través de la Gendarmería nacional comandada por la entonces Ministra de Seguridad Patricia Bullrich –hoy presidenta del partido macrista PRO– y la ya declarada ignorancia (¿?) del Ministro de Relaciones Exteriores de Argentina Jorge Faurie, material bélico de agentes químicos (40 mil cartuchos AT, dos tipos de gases lacrimógenos y tres tipos de granadas), esto según la propia carta de agradecimiento con fecha 13/11/19 del entonces comandante de la Fuerza Aérea Boliviana, general Jorge G. Terceros Lara, al embajador argentino en Bolivia, Normando Álvarez García –hoy miembro del gabinete del gobernador de Jujuy Gerardo Morales, carcelero de Milagro Sala desde hace ya 2 mil días. Aquéllos fueron elementos represivos destinados a doblegar la resistencia del pueblo boliviano al golpe de Estado iniciado el 10/11/19. Gravísimos delitos de lesa humanidad que deben ser perseguidos y juzgados por los poderes judiciales y políticos de Argentina y Bolivia.

Miguel Socolovsky, investigador del Instituto de Ciencias Nucleares de la UNAM

Recuerda a El Chila, un bato golfista de barrio

Cuando lo conocí, él tendría entre 17 y 19 años de edad. En su barrio, La Piojito, en Tlalpan, sus compas le nombraban El Chila; las jovencitas o casadas-jóvenes, El Rorro. Su perfil, como persona, fue definido por una niñez-infancia-adolescencia temprana, perfilada por el espíritu de una pobreza lacerante y vejatoria que resultó en un alcoholismo nunca festivo, siempre con finales lastimosos.

Lo rencontré en el tercer turno de La Veintinueve, la secundaria ubicada a unos metros del zócalo de Tlalpan, como alumno sobresaliente y como bebedor compulsivo. Lo dejé de ver y, por el serpentín de los chismes, supe que El Chila abandonó el seminario que está por San Fernando, donde aspiraba asumirse como sacerdote, al igual que después desertó de la UAM-Iztapalapa, donde aspiraba a ser abogado o economista.

En los setenta, a ese bato de barrio, una foto sorpresiva lo expuso como miembro del equipo que resultó Campeón Nacional de Empleados de Clubs de Golf. En la imagen, compartían la alegría, sonrientemente estáticos, el señor Pereda, Cuco, Rubén Guerrero, El Chila, Ramón Fuentes y otros… ahora, con nombres no recordados.

Por lo anterior, debo decir que en mis 68 años de vida, esa fue la única ocasión donde la clase media-baja, en México, se acercó y rozó tenuemente al golf como deporte, al menos en la capital de la República. Por último, y como comentario personal, coincido con el decir de la maestra Nidia Rivera, en El Correo Ilustrado del pasado miércoles 7 de julio, en el periódico La Jornada, de que el golf es un deporte elitista.

Marcos Aguilar

Felicita a director general del IPN

Estimado director general del Instituto Politécnico Nacional:

Honor a quien honor merece. Lo felicito por el acuerdo entre la Queen Mary University of London y el Instituto Politécnico Nacional. Formidable es la colaboración e interacción entre estas dos instituciones.

Saltos cuánticos deberían acontecer en la Escuela Superior de Física y Matemáticas (ESFM). Imagínese usted sólo lo siguiente: colaborar en Theoretical Physics, los académicos de la ESFM, con gente tan notable como Michael Green, David Berman, Andreas Brandhuber, Peter Hobbson, Malcolm Perry y tantos otros, en matemáticas.

Para hablar en el lenguaje actual del Presidente de la República: Jonrón, señor director general del IPN.

Rubén Mares Gallardo

Sugiere una crítica responsable y constructiva al mandato de AMLO

En el ocaso de la primera mitad y en ciernes de la segunda de su mandato, parece ser que el presidente Andrés Manuel López Obrador decide fajarse sólo con sus detractores y continua de soslayo, con su todavía gran aliado de la mayoría social. Es de por dónde, cómo y con quién.

En la minoría de esta mayoría social históricamente siempre ha existido un movimiento social sobreviviente a todo, incluso a sí mismo, que no puede continuar en la indiferencia del poder. Porque se han hecho infinidad de esfuerzos, individuales, sectoriales y del total colectivo de estar en el debate, con una narrativa fundamental propositiva, netamente estructural y una pretendida legitimidad científica. Sin embargo, sin excepción, todo ha rebotado en una burocracia de Estado, de vicios heredados del régimen anterior de omisión, y si bien hay disponibilidad, es insuficiente.

Que quede claro, la crítica es responsable y constructiva, por ejemplo, la Oficina de Atención Ciudadana de la Presidencia no se da abasto al inmenso rezago de demanda social. Se trata, pues, de una apertura urgente con diálogo franco y directo con los poderes Ejecutivo y Legislativo, un auténtico diálogo de Estado que cobre su real dimensión y dé un golpe definitivo a esta pútrida oligarquía política y financiera. Si es un golpe, sí de clase, pero con el Estado, queda tiempo, acá estamos dispuestos.

Ismael Cano Moreno