Representantes de grupos disidentes del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM) consideraron un amago del dirigente vitalicio Francisco Hernández Juárez el emplazamiento a huelga para el 25 de agosto próximo, luego de anunciar una supuesta ruptura en las negociaciones con la empresa Teléfonos de México (Telmex), toda vez que está estirando la liga, no para defender a los trabajadores, sino para sus intereses personales.

Cristina Zaragoza, de la Red Nacional de Telefonistas, y José Refugio Cano, del Grupo de Defensa Legal y Sindical de los Telefonistas, comentaron que aunque se dijo que es definitivo el emplazamiento a huelga, en los hechos es aparente, ya que desde los últimos tres años ha realizado al menos 25 prórrogas y sólo desgasta a la base trabajadora.

El reciente emplazamiento se da ante la falta de resultados en las negociaciones con la empresa.

Se trata de dos aspectos relativos al pasivo laboral: por un lado, el plan accionario para capitalizar Telmex a cambio de las pensiones de trabajadores jubilados y activos mediante acciones bursátiles. Y, por otro, eliminar la cláusula 149 del contrato colectivo, para que los empleados de nuevo ingreso no accedan a una jubilación bajo el régimen de pensión vigente de los trabajadores activos, sino bajo el sistema Afore.

Refugio Cano señaló que Hernández Juárez viola los estatutos al anunciar acuerdos sin el aval de los trabajadores. Explicó que una asamblea nacional o una convención no puede tomar acuerdos sin recibir primero las propuestas o la ratificación de los trabajadores de cada asamblea seccional y nacional.

Los representantes indicaron que apoyarían una huelga siempre y cuando se defienda realmente los intereses de los trabajadores, porque “en sus 45 años de charrismo sindical, ha permitido que se violente el contrato colectivo de parte del patrón durante muchos años.