Ante lo dicho por el sacerdote Lázaro Hernández, del templo católico de San Juan Bautista de La Salle, en Monclova, Coahuila, en al menos un par de homilías, de que las mujeres que abortan no sirven para nada y que deberían matar a la mamá, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) y la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim) llamaron a no reproducir discursos de odio que inciten a limitar los derechos de las mujeres.

Por medio de un comunicado conjunto con la Secretaría de Gobernación, a través de la Subsecretaría de Desarrollo Democrático, Participación Social y Asuntos Religiosos, las dependencias exhortaron a privilegiar una convivencia en un marco de respeto, trato digno y escucha de las distintas opiniones.

Resulta preocupante que, en el contexto del reciente fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, un ministro de culto haga apología del feminicidio en contra de quienes deciden abortar, indicaron las tres instancias.

Alertaron que los estereotipos y la discriminación de género persisten y la discriminación hacia las mujeres no es aislada ni fortuita: sucede diariamente en todos los ámbitos de la vida y se refleja en patrones de trato desigual, discriminatorio, generalizado y masivo.

La discriminación se agrava para las mujeres indígenas, afromexicanas, con alguna discapacidad o que viva con alguna otra condición de vulnerabilidad, subrayaron las dependencias.