En una agria y ríspida comparecencia en la Cámara de Diputados, Morena acusó que el Instituto Nacional Electoral (INE) pretende erigirse en un cuarto poder e incluso llamó ¡traidor! y obsesivo demencial a Lorenzo Córdova Vianello, quien llevó a la tribuna un ejemplar de Cuentos de futbol, del que pidió se leyera un extracto de El árbitro, de Eduardo Galeano: cuanto más lo odian, más lo necesitan.

Durante casi cinco horas, en la que fue la primera comparecencia ante el pleno de un presidente del Consejo General del INE, las distintas bancadas demandaron austeridad del órgano electoral, le reprocharon arrogarse atribuciones legislativas e incluso Morena le demandó renunciar de inmediato.

Córdova llamó a los legisladores a no recortar el monto de 3 mil 830 millones de pesos solicitado para organizar y realizar la consulta de revocación de mandato presidencial en 2022.

No pongan en riesgo la revocación, porque esto podría implicar que el Presidente dejara o continuara su mandato, resaltó.

El tono de confrontación entre los diputados y el consejero fue tal que Hamlet García (Morena) reprodujo el grito grosero a los silbantes: ¡Árbitro, reciba un saludo del pueblo de Guerrero y del pueblo de Michoacán!

En un exceso de rudeza, Óscar Cantón, también de Morena, dejó con la mano estirada a Córdova, quien le dio una palmadita, que el tabasqueño se sacudió: ¡No me toques, igualado! ¿De dónde te salió lo farsante y lo obsesivo contra el Presidente? Con todo, al final de la intervención de Cantón, los dos se abrazaron, entre risas.

Ante la insistencia de los diputados de Morena y PT para que él y los consejeros electorales acepten reducir su salario, Córdova replicó que la cámara aprobó en mayo una excepción, para que los consejeros ganen más que el Presidente.

Al PT no le gustó la respuesta y Benjamín Robles le espetó: ¡Bájele dos rayitas! ¡No venga a regañarnos!

Córdova ya había señalado que el asunto está sujeto a una decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Lilia Aguilar (PT) insistió: Responda sobre su salario. Mordaz, el funcionario replicó: Ya contesté. Una cosa es que no hayan entendido lo que les dije, que vamos a esperar lo que resuelva la Corte y que ustedes lo autorizaron. A veces conviene leer.

El corte de la respuesta obligó a la presidencia de la mesa directiva a reconvenirlo y exigirle el debido respeto a los diputados. Córdova se disculpó y Lilia Aguilar punzó: No necesitamos un bravucón de lengua floja, con tendencia al sofisma y un ego grande. ¡Gobiérnese!

Durante la comparecencia, el consejero defendió que la inversión en democracia ha permitido que las elecciones ya no sean un problema y acusó a la cámara de omisiones legislativas, pero ofreció ayudarle a resolver esos vacíos, e incluso a colaborar con la confección de la reforma electoral que anunciaron Morena y sus aliados.

Córdova sostuvo que el INE es muy celoso de su autonomía y, en su última intervención, resaltó: Mis compañeros consejeros y yo vamos a defender la autonomía e independencia del instituto, incluso de sus detractores y sus principales beneficiarios.

Planteó que la democracia como forma de gobierno debe cuidarse y preservarse, porque ha costado mucho construirse y no implica una sola ruta en una dirección unívoca, que puede suponer rutas de regreso y se puede acabar si no la cuidamos.

Morena cuestionó que el órgano interno de control en el INE ha documentado casos de acoso laboral, nepotismo, conflicto de intereses, y el funcionario respondió que, hasta ahora, por ello no se ha impuesto ninguna sanción.

La bancada mayoritaria insistió en recordar cómo el INE revocó las candidaturas de Félix Salgado Macedonio y Raúl Morón para las gubernaturas de Guerrero y Michoacán, respectivamente.

El consejero manifestó que los ahora diputados están entre los 29 mil candidatos que sí presentaron sus gastos de precampaña. Las decisiones siempre son criticadas y los partidos esperan que éstas los beneficien. Cuando no se favorece a ciertos intereses, se disiente, agregó.

Los panistas, que lo arroparon durante toda la comparecencia, hicieron valla para acompañarlo a su salida. Y algunos diputados de Morena insistieron: ¡Menos sueldo, menos sueldo..!