El Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) realizará la compra de 909 claves de medicamentos, vacunas y material de curación para el abasto de 2022. Aunque existe ya un calendario que prevé la publicación de las convocatorias los días 16, 23 y 30 de noviembre, los fabricantes no tienen información oficial ni saben cuándo iniciará la Oficina de Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (Unops) su propio proceso de adquisición.

En la agencia internacional tampoco existe claridad sobre el volumen que le corresponderá licitar. Está en negociación con el Insabi y se prevé que en la tercera semana de este mes se realice una sesión informativa en conjunto con dicho instituto y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), donde se presentarán los detalles de las actividades que realizará cada instancia.

Personas cercanas al organismo internacional recordaron que los contratos firmados en mayo de 2021 estarán vigentes hasta el 30 de junio de 2022, por lo que aún hay tiempo para concretar las compras del próximo año.

Al respecto, Juan de Villafranca, director de la Asociación Mexicana de Laboratorios Farmacéuticos (Amelaf), insistió en que debe haber información y una definición en la demanda para el siguiente año, con la cual, los fabricantes pueden iniciar la planeación de sus procesos de producción que tarda alrededor de cuatro meses, incluida la adquisición de la materia prima.

En tanto, con la licitación consolidada que hará el Insabi, se ratifica que la Unops no será el único comprador, como se planteó en julio de 2019 cuando se firmó el convenio entre ambos organismos.

De hecho, el Insabi obtendrá casi la mitad de lo adquirido en este año –en total fueron mil 840 claves–, lo que incluye 241 de productos de patente. No se considera la participación de los servicios médicos de Petróleos Mexicanos (Pemex) ni realizar una compra multianual como se informó hace varios meses.

En un oficio, del que La Jornada tiene copia, dirigido a las secretarías de la Defensa Nacional y de Marina, los institutos Mexicano del Seguro Social (IMSS) y de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), la Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud, los Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad y el Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social, el Insabi informa sobre el calendario para lo que ahora denomina contratación consolidada y solicita a las dependencias que designen representantes administrativo y técnico (este debe ser un médico) con facultades para tomar decisiones durante el desarrollo de la licitación.

En tanto, integrantes de la industria farmacéutica señalaron que persisten los problemas con las entregas de insumos y los pagos, los cuales acumulan un retraso de más de 90 días.

Aunque hace unas semanas el Insabi presentó una plataforma para agilizar los trámites administrativos de las entregas de los bienes, así como para la facturación y pago a proveedores, los problemas no se resuelven y también hay impagos por parte de la Unops, afirmaron los empresarios.

Uno de los problemas es que, debido a la saturación de almacenes, los operadores logísticos (distribuidores) contratados por el Insabi rechazan los productos, siendo que un requisito para cobrar con el Insabi y la Unops es que la totalidad de éstos se entreguen en las unidades médicas.