Los cárteles Jalisco Nueva Generación (CJNG), del Golfo y de Sinaloa llegan a realizar operaciones en la ciudad como parte de su esquema de trasiego de drogas, pero no necesariamente están asentados en el territorio capitalino, afirma el secretario de Seguridad Ciudadana local, Omar García Harfuch, en el informe que envió al Congreso de la Ciudad de México con motivo de la glosa del tercer Informe de gobierno.

El jefe de la policía capitalina recuerda que se logró la detención de integrantes del CJNG vinculados a los hechos ocurridos en la Plaza Artz (donde fueron asesinados dos israelíes en julio de 2019) y el atentado perpetrado en su contra en junio de 2020, en referencia al ataque armado en el que sujetos le dispararon desde una camioneta de 3.5 toneladas en el cruce de Monte Blanco y Reforma, colonia Lomas de Chapultepec, cuando se dirigía a la reunión del gabinete de seguridad en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento.

Destaca que en coordinación con la Fiscalía General de Justicia y con apoyo de las secretarías de la Defensa Nacional, de Marina y la Guardia Nacional, al 31 de agosto pasado se cumplieron mil 12 órdenes de cateo en las que se detuvo a mil 436 presuntos delincuentes, de los cuales 101 son considerados por las autoridades capitalinas como objetivos prioritarios.

En el informe previo a su comparecencia, que se prevé sea este jueves, menciona que con la detención de líderes, operadores, sicarios y distribuidores de droga se logró la desarticulación y debilitamiento de varios grupos delictivos, entre los que enlistó a la Unión Tepito.

Especifica que se trata de diversas células del grupo delincuencial, entre las que destacan la de El Lunares, Los Malcriados 3AD, El Charro, Fabián de la Ronda 88 y Gota a gota, así como los grupos delictivos de Juan Balta y Fuerza Anti Unión Tepito.

También enumera las organizaciones criminales que operan en la zona sur de la capital, como el cártel de Tláhuac, Los Rodolfos, Los Guerreros y Don Agus, que en su mayoría se dedican a la venta y distribución de droga, extorsión, cobro de piso, privación ilegal de la libertad y homicidio.

Además de los grupos delictivos de El Oso y El Patas, vinculados al despojo de predios y tala ilegal en la zona del Ajusco.