Pertenecer al equipo del Canelo Álvarez que dirige Eddy Reynoso es un privilegio que envidiaría cualquier boxeador. Pero también signifi-ca ocupar un lugar discreto, de se-gunda fila, mientras la estrella demanda la atención más minuciosa, reconoce el mánager Mauricio Aceves.

El campeón mosca del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Julio César Rey Martínez, vive esta experiencia de pertenecer al equipo más exitoso del momento y, al mismo tiempo, aceptar un puesto periférico en el equipo de peleadores.

“Rey Martínez no puede hacer toda su carrera a la sombra de Canelo”, expresa Aceves, entrenador del monarca; “sabemos que Eddy debe dedicar toda su atención a su estrella, Canelo; es lo normal y así ha sido siempre con los manejadores de grandes equipos, pero uno también debe tratar de no depender por completo. Hay que aprovechar la plataforma y buscar por uno mismo”.

El beneficio es indiscutible, explica. Rey Martínez tiene la posibilidad de una proyección mayor al ser promovido por Reynoso, incluso ha sido programado en las funciones de Álvarez, pero también siempre estará en plano secundario respecto a las prioridades del equipo.

Después de retener el título ante el boricua McWilliams Arroyo el viernes pasado, ahora apuntan a la unificación con otros organismos. La mejor manera de ser reconoci-do como un campeón legítimo es vencer a sus iguales, agrega.

“Hay que aprovechar el impul-so que nos ofrece Canelo Team para que vean a Rey”, dice Aceves; es un muchacho que gusta como boxeador, tiene valor y se entrega para que el público quede satisfecho. No le interesa ganar por ganar.

Como ejemplo, Aceves recuerda lo difícil que fue el pasado compromiso. Después de un par de ocasiones fallidas, por fin se enfrentó a Arroyo en un combate que terminó sin decisión cuando el boxeador boricua se negó a continuar con un corte.