Ginebra. La altamente contagiosa variante delta del coronavirus redujo a 40 por ciento la eficacia de las vacunas, destacó ayer el secretario general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, al instar al público a seguir usando mascarillas y respetar las medidas de distanciamiento. Las vacunas salvan vidas, pero no impiden totalmente la transmisión del Covid-19, advirtió.

Hay datos que sugieren que antes de la llegada de la variante delta, las vacunas reducían la transmisión en 60 por ciento pero, con su aparición, la efectividad cayó a 40 por ciento, señaló Tedros. En muchos países y comunidades tememos que exista la idea errónea de que las vacunas han puesto fin a la pandemia y que las personas inmunizadas ya no necesitan tomar más precauciones, añadió.

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) informó que en América los nuevos casos de Covid-19 se dispararon 23 por ciento, sobre todo en Estados Unidos y Canadá, con picos en Bolivia, Ecuador y Paraguay. Añadió que la región podría tener una recaída como Europa.

Los casos subieron 11 por ciento en Europa en la semana reciente, la única región en el mundo donde el virus continúa con repuntes desde octubre, informó la OMS. Alemania, la nación más afectada por esta cuarta ola en el continente, se acerca a 100 mil muertos.

La OMS espera que los decesos rebasen 2 millones para marzo próximo. Gran Bretaña ya superó un millón y medio de fallecidos y el coronavirus es actualmente la principal causa de muerte del continente, donde aún existen gran número de personas no vacunadas, señaló el encargado de la organización para Europa, Hans Kluge.

Agregó que 53.3 por ciento de los europeos tienen esquema completo de vacunación, pero hay muchas diferencias entre los distintos países del continente, pues el índice de inoculación en algunos es de 10 por ciento, y en otros, de 80. El Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades recomendó refuerzos para todos los adultos, con prioridad para mayores de 40 años.

Prioridad a Covax

La OMS señaló ayer que dado que los niños y los adolescentes corren menor riesgo de padecer Covid-19 grave, los países deberían dar prioridad a compartir las dosis con el programa Covax para llevar los suministros que se necesitan con urgencia a los países más pobres.

Dado que muchas partes del mundo enfrentan escasez extrema de vacunas, los países con alta cobertura en las poblaciones de riesgo deben dar prioridad al reparto global de los biológicos antes de inmunizar a los niños y los adolescentes, indicó la organización.

La Casa Blanca informó que la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional ordenó a todas las empresas con sede en el país que cuenten con una plantilla de más de 100 personas que las vacunen a más tardar el 4 de enero de 2022. El tribunal de apelaciones del quinto circuito decidió suspender esta norma.

En respuesta, al menos 600 empleados de Google solicitaron en una carta colectiva a la gerencia de la empresa que elimine el requisito de vacunarse y proponga otro más inclusivo. En el documento, los trabajadores de Google también instan a manifestarse en contra de la demanda y a no retractarse de la decisión de no vacunarse, informó la cadena CNBC.

El presidente ruso, Vladimir Putin, anunció ayer que recibió una vacuna nasal experimental tres días después de recibir su inyección de refuerzo. Rusia enfrenta el mayor pico de contagios y muertes desde el inicio de la pandemia.

Putin recibió la vacuna Sputnik V, de fabricación local, a mediados de año. El domingo dijo que se le administró una dosis de refuerzo de Sputnik Light y que quería participar de las pruebas de la Sputnik V en su presentación nasal. Rusia desarrolla además una vacuna especialmente formulada para niños.

En las semanas recientes, Rusia ha reportados tasas sin precedente de contagios y muertes. Menos de 40 por ciento de los rusos están completamente vacunados y la población es descuidada con las medidas de prevención.

La pandemia ha causado hasta el momento 259 millones 363 mil 18 casos confirmados y 5 millones 173 mil 611 decesos, según la Universidad Johns Hopkins.