Los Cardenales de Arizona y los Bucaneros de Tampa Bay consiguieron sendas victorias que los ratifican en la recta final de la temporada en la NFL como una de las dos franquicias más sólidas para llegar al Supertazón; los Acereros de Pittsburgh obtuvieron un triunfo vital que les da oxígeno y los mete de lleno en sus aspiraciones a la postemporada. Los Leones de Detroit, en tanto, dieron la sorpresa en la semana 13 al perpetrar su primera victoria de la campaña.

Los Cardenales acudieron a Soldier Field para imponerse cómodamente a los Osos de Chicago por 33-22, en el regreso del mariscal Kyler Murray tras una lesión de tobillo que lo alejó tres semanas. Murray lanzó dos pases de touchdown, anotó dos veces más por tierra y se convirtió en el cuarto jugador más joven en sumar 10 mil yardas por aire en su carrera. Arizona aumenta a 10 sus victorias, el mejor récord de la NFL.

Muy cerca de la marca de los Cardenales se encuentran los vigentes campeones, los Bucaneros de Tampa Bay (9-3), que ayer quedaron más cerca del cetro del Sur de la NFC al vencer 30-17 a los Halcones de Atlanta. Un espléndido Tom Brady añadió a su cuenta 368 yardas por aire y cuatro pases a las diagonales para que los Bucs ganaran su tercer duelo seguido e incrementaron su distancia en la división a cuatro juegos por encima de Atlanta, Carolina y Nueva Orleans (todos con 5-7) con cinco partidos por disputar.

Rob Gronkowski, por su parte, alcanzó la zona prometida en dos ocasiones y la dupla Brady-Gron sumó 90 anotaciones, dejando atrás a Phillip Rivers y Antonio Gates en el segundo lugar en la lista histórica de la NFL. Peyton Manning y Marvin Harrison lideran con 112.

En Heinz Field, los Acereros de Pittsburgh sufrieron hasta el final para vencer en duelo divisional a los Cuervos de Baltimore por 19-20, una conquista que los relanza en su camino por meterse a la postemporada y que los saca del último lugar del Norte de la AFC. El epílogo del enfrentamiento fue dramático. Cuando restaba 1:48 para culminar el cotejo, el receptor Diontae Johnson anotó y Pat Freiermuth consiguió la conversión para dejar la pizarra en 20-13 a favor de Pittsburgh en ese momento.

En la siguiente ofensiva, a Lamar Jackson le tomó poco tiempo ponerle un balón a Sammy Watkins para acercar el marcador a un punto. Quedaban 12 segundos y todos esperaban que el pateador ingresara para añadir el punto extra y mandar el partido a la prórroga. No fue así.

El head couch John Harbaugh tomó la decisión de jugársela en conversión. Su atrevimiento le costó caro, sus pupilos fallaron y obsequiaron la derrota, pese a lo cual los Cuervos siguen comandando su división con récord de 8-4, mientras Pittsburgh tiene 6-5.

Pasaron más de tres meses para que los Leones de Detroit (1-10-1) al fin alcanzaran su primera victoria. Esta llegó en Minnesota ante los Vikingos ( 29-27).

Washington Football Team (6-6) y las Águilas de Filadelfia (6-7), ambos en condición de visitante, concretaron sendas victorias ante los Raiders de Las Vegas (17-15) y los Jets de Nueva York (33-18), por lo que le meten presión a los Vaqueros de Dallas (8-4) en una NFC Este que aún no está definida.

En la tarde, los Halcones Marinos de Seattle sometieron 30-23 a los 49’s de San Francisco y rompieron una racha de tres derrotas consecutivas; en tanto, los Carneros de Los Ángeles dejaron su récord en 8-4 tras apalear a los Jaguares de Jacksonville por 37-7.

Los Texanos de Houston recibieron su segunda blanqueada en 13 fechas al caer 31-0 ante los Potros de Indianápolis. Los Cargadores dominaron 41–22 a los Bengalíes y Delfines le pegó 20-9 a Gigantes.

Con información de Ap