Cinco minutos bastaron para que sus compañeros de batalla se convirtieran en chatarra y dejaran atrás los recuerdos de miles de viajes realizados, las vacaciones de la familia y los logros alcanzados por los hijos, afirmaron taxistas.

Con el proceso de chatarrización de 43 taxis que cumplieron su vida útil, llegó la renovación de 228 unidades, cifra 40 por ciento menor a la meta estimada de 374 por la emergencia sanitaria, pues muchos concesionarios no lograron obtener un préstamo o cayeron en el buró de crédito.

Esto ocasionó que se erogaran menos de 30 millones de pesos previstos en el Fideicomiso para el Fondo de Promoción para el Financiamiento del Transporte para 2021, misma cantidad que se tendrá este año para sacar de circulación y renovar 400 unidades.

En la planta Derichebourg, en Santa Clara, municipio de Ecatepec, estado de México, la directora técnica y de órganos desconcentrados, Lídice Rocha, señaló que la Secretaría de Movilidad entregó apoyos de 75 mil a 100 mil pesos a los taxistas.

Esta cifra es adicional a los créditos de cinco a seis años que obtuvieron para comprar un vehículo eficiente –no contaminante y con mayor rendimiento de gasolina– y uno híbrido, cuyos precios fluctúan entre 250 mil y 300 mil pesos, con una tasa de interés de 7 por ciento.

Se trata de que compitan en mejores condiciones con los servicios de plataformas digitales, por lo que a la fecha se han entregado mil 100 apoyos, cifra que se espera duplicar al final de la administración, aunque reconoció que son 20 mil de una flota de 140 mil vehículos que ya concluyeron su vida útil.

Fernando Cisneros, Jorge Medina, José Enrique Vizcaya y Eduardo Carrasco expresaron una serie de sentimientos encontrados momentos antes de ingresar con sus taxis a la planta, donde se irán tantas aventuras y anécdotas, porque son parte de la familia.

Comentaron que es darle el último adiós al amigo que nos sacó de apuros, nos ayudó a sacar adelante a la familia y hasta nos permitió viajar o fue una herencia, y requiere ya cambiarse para seguir trabajando.

La emergencia sanitaria fue un duro golpe, pero logramos sortearla, aunque el pasaje se redujo hasta la mitad y confiamos en que podremos pagar las mensualidades de 5 mil o 6 mil pesos para conservar nuestra fuente de trabajo y no perder nuestro carrito.