Boston. En los últimos 400 metros, Peres Jepchirchir se fue en solitario a la meta para ganar el maratón de Boston (2:21.01), con lo que confirmó ser la mejor exponente luego de sus triunfos en los Juegos Olímpicos de Tokio y la carrera de 42.195 kilómetros en Nueva York, el año pasado. La keniana redondeó el doblete para su país tras la victoria de Evans Chebet (2:06.51), en la rama varonil.

Jepchirchir sostuvo una épica batalla con la etíope Ababel Yeshaneh. Las dos se alternaron ocho veces en la punta y fue casi hasta el final cuando la keniana dio el jalón del triunfo y superó por cuatro segundos a su rival.

Su compatriota Mary Ngugi (2:21.32) quedó tercera por segunda vez en seis meses. Ya había ocupado esa posición en octubre, cuando se corrió la edición de 2021, demorada por la pandemia.

Ella es fuerte, expresó Jepchirchir, quien ganó 150 mil dólares en su primera participación en Boston. Quedé atrás por momentos, pero nunca perdí la esperanza.

En determinado momento, la etíope se distrajo y tropezó con Jepchirchir, quien no se molestó. Ella es mi mejor amiga, afirmó. La pelea entre africanos también se dio en los varones. El keniano Evans Chebet dio la sorpresa al superar a dos campeones de ediciones anteriores que eran favoritos, entre ellos, el monarca defensor Benson Kipruto. Chebet, con una acelerada monumental en los últimos kilómetros, se desprendió del resto para ganar en 2:06.51 superando a sus compatriotas Lawrence Cherono por 30 segundos y al hasta ayer poseedor del título, Kipruto, quien culminó tercero con 2:07.27.

Quiero agradecer a Dios, expresó Chebet, el quinto keniano que gana este maratón en los recientes 10 años. En 2018 no me fue bien. Hoy estuve mejor.

El estadunidense Daniel Romanchuk se adjudicó por segunda vez la carrera en silla de ruedas, con 1:26.58. La suiza Manuela Schär refrendó el título consecutivo y cuarto en total en la prueba femenina, en 1:41.08.

A lo largo del recorrido de los 30 mil competidores, abundaron las banderas de Ucrania en apoyo de esa nación, que fue invadido por Rusia. Los organizadores retiraron la invitación a los corredores rusos y su aliado Bielorrusia.