Jueves 19 de mayo de 2022, p. 13
La virtualidad en la educación orilló a que 66 por ciento de los estudiantes universitarios adquirieran entre uno y dos dispositivos para poder atender sus clases a distancia
, las compras más destacadas fueron laptops, teléfonos inteligentes y tabletas. Asimismo, siete de cada 10 debió ampliar sus servicios de Internet, reveló la Encuesta de Hábitos de Educación a Distancia, panorama a dos años de la pandemia de covid-19.
En el sondeo realizado por expertos del Tecnológico de Monterrey a estudiantes de universidades públicas y privadas se evidenció que 70 por ciento
de los alumnos ha sentido invasión a la privacidad
ante la necesidad de prender las cámaras para tomar clases.
Leonardo Glasserman, investigador de la Escuela de Humanidades y Educación, catalogó de dato revelador
la sensación de invasión de su privacidad cuando se les solicitaba prender las cámaras, porque se mostraba lo que tenían en la parte de atrás
, pero, mencionó, algunos lo resolvían usando un fondo virtual, y añadió que 76 por ciento veían que la pandemia sí estaba afectando su aprendizaje
.
No obstante, nueve de cada 10 universitarios reconoció el compromiso por parte de los profesores
, notaban que éstos, dedicaban tiempo y esfuerzo
para dar sus clases a distancia.
Carlos George, del Grupo de Investigación en Innovación Educativa del Tec de Monterrey, indicó que a 700 días de la pandemia
, no se debe desaprovechar la acumulación de experiencia y capitales digitales que dejaron los modelos de enseñanza no presencial. Estos dos años hemos avanzado como nunca lo habíamos hecho en el uso de herramientas digitales para fortalecer los aprendizajes
.
Por eso “sugerimos que los hábitos de estudio que se fortalecieron o emergieron deben ser utilizados en esta época de presencialidad académica. Lo que se hizo durante la pandemia no está peleado con lo que se puede hacer después.
El uso de herramientas de realidad virtual puede seguir siendo útil en los entornos presenciales, no hay que hacer una segmentación entre lo presencial y lo no presencial.
Aunque en un principio había dudas sobre las destrezas tecnológicas de los maestros y muchos fueron adquiriendo capacidades y habilidades, 82 por ciento de los estudiantes consideró que sus profesores han mostrado dominio amplio del uso de las tecnologías para el aprendizaje y conocimiento en entornos de educación a distancia”, sostuvo Glasserman.
Acotó que 90 por ciento de los alumnos consideró que las universidades deberían equilibrar estrategias de aprendizaje con actividades presenciales y no presenciales.
La encuesta se realizó a 3 mil universitarios, tanto de carrera como de posgrados. La mitad de la muestra fue alumnado de instituciones públicas, hubo equidad en la cantidad de mujeres y hombres consultados y se tomó en cuenta también el género no binario.