Dragonas, el nuevo reto de Ho Chia mi
Miércoles 25 de mayo de 2022, p. a11
Viajar sola al otro lado del mundo, sin representante y con un escaso conocimiento del idioma y cultura del nuevo destino, fue el reto que decidió tomar Ho Chia Mi o Valeri, como prefiere que la llamen en español: es un caso atípico, dejó hace unas semanas Taiwán para buscar la internacionalización en la amateur Liga Mayor Femenil, uno de los semilleros del futbol de mujeres en México.
Cuando no conoces bien a México, una de las primeras cosas que verás será el futbol, el cual tiene un ambiente que te impulsa a ser mejor. Espero aprender de la liga para desarrollar mi carrera
, indicó la delantera en un inglés fluido.
A principios de la década de 1980 el balompié femenil de Taiwán vivió momentos de esplendor al ganar la Copa Asiática, pero después fue perdiendo fuerza. Hoy su liga profesional sólo cuenta con seis planteles.
Valeri, de 25 años de edad, es de las pocas taiwanesas que se han apasionado por el futbol al grado de buscar el profesionalismo, aun cuando su primer contactó con el balón llegó de manera tardía.
Conocí el futbol cuando iba a la escuela y al inicio lo practicaba sólo por diversión, pero poco a poco me enamoré más de este deporte. Comencé a jugar ya tarde, tenía 18 años, pero siempre estuve practicando hasta que conseguí un contrato
, narró.
En una cultura tradicional y donde el balompié femenil es poco popular, la familia de Valeri mostró resistencia en un inicio para que jugara. Creían que era un deporte peligroso para mí por los golpes en la cancha
.
Aun cuando las opciones eran pocas y sin el respaldo de su familia, logró jugar casi un año con el club Inter en la Primera División de Taiwán. Pero al ser una liga con pocos planteles comprendió que debía mirar hacia el extranjero si quería un mayor crecimiento futbolístico.
En un mundo que apenas comienza a crecer como es el balompié femenil y donde la mayoría de las integrantes buscan por sí mismas las oportunidades, algunas amistades le hablaron a Valeri de México y de la Liga Mayor, la cual podría servir de vitrina para su carrera.
En una era donde las redes sociales facilitan la comunicación a grandes distancias, revisó los perfiles en Facebook de los clubes de la Liga Mayor y se decantó por el plantel de Dragonas. Así, envió un video con la recopilación de sus mejores jugadas y de manera sorpresiva consiguió un contrato para venir a México.
Sabía que en México había una liga profesional y la Mayor, donde ahora juego, la competencia es muy intensa, todas quieren ser la mejor y ese ambiente es el que te impulsa a crecer
, señaló.
Para los directivos de Dragonas fue como encontrar una joya bastante peculiar que podría potencializar al torneo al ser, quizá, la primera asiática que juega en el futbol mexicano.
Decidimos sumarla a nuestro equipo porque es una buena oportunidad de un intercambio cultural para nuestras jugadoras, además vimos un buen nivel de juego cuando mandó sus videos de prueba
, indicó Rodrigo Dey, dueño del club Dragonas.
Con apenas 15 días en el país y dos partidos disputados, la cultura mexicana, así como el tráfico automovilístico y la comida no dejan de sorprender a Valeri, quien por ahora aún trabaja como asesora en inglés para una compañía de Taiwán y renta aquí una vivienda por medio de una aplicación.
Ya fui al estadio Azteca al encuentro entre América y Tigres, me sorprendió mucho la gran afición que hubo, espero en algún momento poder estar ahí
, dijo.
En una análisis sobre las circunstancias globales del balompié de mujeres, Valeri lamentó que aún hay lugares que no consideran como futbol profesional la categoría femenil
.
Así como lo padecen en México varias jugadoras, reconoció que uno de los mayores retos del futbol femenil es encontrar un mayor respaldo financiero
.