Miércoles 25 de mayo de 2022, p. 13
La presencia de ejemplares de mariposa monarca en los bosques de oyamel de Michoacán y el estado de México creció 35 por ciento en la reciente temporada, ya que ocuparon 2.84 hectáreas de bosque, frente a las 2.10 reportadas la temporada anterior. En 29 años de monitoreo del arribo de esta especie a territorio nacional, esta cifra es muy lejana de las 18 hectáreas que el lepidóptero ocupó en el ciclo 1996-1997.
Este ligero incremento se debió a la repoblación temprana de mariposas en el sur de Estados Unidos, informaron la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) y la Alianza WWF-Fundación Telmex-Telcel al presentar el reporte anual de la presencia del lepidóptero, que pasa el invierno en los bosques mexicanos después de viajar 4 mil kilómetros desde Canadá.
Informaron que el primer arribo de la mariposa monarca fue el 13 de septiembre del año pasado en Ciudad Acuña, Coahuila, y el pico de la migración ocurrió el 15 de octubre. Se asentaron en 10 colonias, seis en la Reserva de la Biosfera de la Mariposa Monarca y cuatro fuera de ella.
Agregaron que se abrieron tres santuarios para visitar a la monarca en Michoacán (El Rosario, Sierra Chincua y Senguio)y uno en el estado de México (en Piedra Herrada, Valle de Bravo). Acudieron alrededor de 186 mil visitantes.
Noticia positiva
Jorge Rickards, director de WWF México, señaló que el aumento de las monarca esta temporada es una noticia positiva: Nos indica que debemos seguir trabajando para mantener esta tendencia y reforzar las medidas de protección por parte de México, Estados Unidos y Canadá. Las monarcas son polinizadoras importantes, y su viaje favorece la reproducción, con mayor diversidad, de plantas con flores, lo que beneficia a otras especies en los sistemas naturales y contribuye a la producción de alimentos para el consumo humano en los sistemas productivos
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La Conanp informó que la colonia más grande, con 1.1 hectáreas, se registró en el ejido El Rosario, en el santuario Sierra Campanario, Michoacán, y la colonia más pequeña, con 300 metros, se localizó en el ejido Crescencio Morales, en el mismo estado, la cual reapareció después de haberse encontrado con anterioridad desde 2003-2004.