Muestran poderío en la ciudad vieja de Jerusalén
muerte a los árabes
Cerca de 80 heridos y 60 detenidos en varios incidentes
Lunes 30 de mayo de 2022, p. 27
Jerusalén. Decenas de miles de nacionalistas israelíes, algunos de ellos al grito de muerte a los árabes
, marcharon ayer por el corazón de la principal arteria palestina de la Ciudad Vieja de Jerusalén, en una exhibición de fuerza que podría desencadenar una nueva ola de violencia en la crispada ciudad.
En Jerusalén, al menos 79 personas resultaron heridas en la jornada en diferentes incidentes, de acuerdo con la Media Luna Roja palestina. La policía reportó unos 60 detenidos. Choques entre la policía israelí y palestinos dejaron 219 civiles heridos, incluidos 16 de bala, en la ciudad cisjordana de Nablus.
También hubo enfrentamientos en las localidades cisjordanas de Burqa, Bazaria, Burin, Qusra y Cirenaica, donde las fuerzas israelíes utilizaron gas lacrimógeno y bombas de sonido contra los palestinos y las viviendas.
Los nacionalistas, unos 70 mil según la policía, que en su mayoría eran jóvenes judíos ortodoxos, celebraron el Día de Jerusalén, feriado israelí que marca la anexión de Jerusalén Este, incluida la zona antigua, en la Guerra de los Seis Días de 1967.
Los palestinos ven la marcha, que pasa por el corazón del Barrio Musulmán, como una provocación. El año pasado, una movilización similar contribuyó a desatar una guerra de 11 días entre Israel y milicianos de la franja de Gaza, que dejó 260 palestinos muertos, incluidos 66 niños, mientras 14 personas murieron en Israel, ente ellos un menor.
La marcha de este año provocó condenas de la Autoridad Nacional Palestina y de la vecina Jordania.
Israel desplegó miles de policías por toda la ciudad para vigilar la marcha de ayer. Hubo escaramuzas violentas entre grupos judíos y palestinos dentro de la Ciudad Vieja aun antes de que comenzara la movilización.
A medida que avanzaba la marcha, grupos de jóvenes judíos ortodoxos se reunían frente a la Puerta de Damasco, agitando banderas israelíes, coreando canciones religiosas y nacionalistas y gritando: viva la nación judía
antes de ingresar al Barrio Musulmán. Un gran grupo coreó muerte a los árabes
y dejen que su aldea se incendie
antes de ingresar a la Ciudad Vieja.
La policía sacó a los palestinos del área, que normalmente es una calle palestina muy concurrida. En cierto momento, un dron que enarbolaba una bandera palestina voló por encima antes de que la policía lo interceptara.
Breves enfrentamientos se registraron entre palestinos y policías israelíes frente a la Puerta de Damasco, por la que entraron los manifestantes en la Ciudad Vieja.
En el barrio musulmán se lanzaron proyectiles contra la marcha, constató un periodista de la agencia de noticias Afp, en tanto se arrojaron botellas de agua contra camilleros que transportaban a un palestino herido.
El canciller de Israel, Yair Lapid, calificó de desgracia
los cánticos contra los árabes.
En puntos de Jerusalén Este muchos palestinos pusieron banderas en los tejados y ventanas, en señal de protesta ante esta celebración israelí.
Los palestinos aspiran a que Jerusalén Este sea un día la capital de su futuro Estado.
Horas antes de que la marcha diera comienzo Itamar Ben Gvir, líder de extrema derecha israelí, y otros nacionalistas, visitaron la Explanada de las Mezquitas, en Jerusalén Este.
La explanada es el corazón de las recientes tensiones israelí-palestinas en la Ciudad Vieja de Jerusalén.
Se trata del tercer lugar más sagrado para el Islam y el más sagrado para los judíos, que lo llaman el Monte del Templo. El statu quo en vigor estipula que los judíos pueden entrar en la explanada, pero no pueden orar allí.
Los palestinos consideran una provocación
la entrada de los judíos al lugar, cuyos accesos también están controlados por las fuerzas israelíes.
Ayer, unos mil 800 no musulmanes, en su mayoría turistas y también israelíes, visitaron la explanada, indicó la policía.