Miércoles 22 de junio de 2022, p. 21
Altán Redes, la empresa privada que el gobierno mexicano rescata para sostener el despliegue de la Red Compartida, se beneficiará de una extensión automática de su contrato. En lugar de 20 años, con posibilidad de prórroga, tendrá asegurado su negocio por 40 años, en lo que se van saneando sus finanzas y a medida que los accionistas pagan un crédito de la banca de desarrollo para recuperar su participación en la firma.
Contrario a lo dicho por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que ahora tiene el gobierno, Estado mexicano, el pueblo de México un sistema de comunicación, que no tenía
, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) informó que las acciones de Altán pasarán de nuevo a privados cuando se pague el crédito inyectado por la banca de desarrollo.
Al dar cuenta de un par de resoluciones sobre competencia económica, el IFT avaló que el contrato de APP (asociación público privada) de la Red Compartida –en la que participa Altán Redes como empresa privada y el Organismo Promotor de Inversiones en Telecomunicaciones (Promptel) por parte del Estado– sea modificado.
Entre los cambios aprobados se encuentra el tiempo que durará el contrato. En lugar de 20 años con posibilidad de prórroga, quedará en 40 años sin que se pueda renovar. Además, se reiteran los ya extendidos plazos para que la Red Compartida cumpla con los objetivos de cobertura.
Si no se avala una nueva modificación, como ya ha ocurrido, la Red Compartida deberá ofrecer servicio a 70 por ciento de la población mexicana el 30 de noviembre de 2022; a 85 por ciento el 24 de enero de 2027 y a 92.2 por ciento el 24 de enero de 2028. Lejos queda la promesa de la actual administración de llevar Internet a todo el país antes de que concluya el sexenio.
Dado que la banca de desarrollo mexicana inyectará 161 millones de dólares a Altán, en concurso mercantil desde el año pasado, el IFT aprobó que ésta nombre a los miembros del consejo de administración y a otros directivos.
No obstante, el regulador en telecomunicaciones prohibió que los nuevos directivos sean miembros del consejo de administración (u órgano equivalente) gerentes, administrador o equivalente en otra empresa de telecomunicaciones; además deberán contar con experiencia y conocimientos necesarios en redes de telecomunicaciones con una complejidad equivalente a la Red Compartida.
Previamente aprobó la concentración de Altán que consiste en que los accionistas de estas empresas conviertan deuda en acciones; luego que éstos aporten 50.5 millones de dólares a la firma; mientras Banobras, Nafin y Bancomext erogarán aproximadamente 161 millones de dólares.