Un día después de que el Banco de México anunció una subida de tres cuartos de punto porcentual en su tasa de interés de referencia –un salto sin precedente–, como una medida para enfrentar la inflación, el peso se fortaleció y concluyó la semana por debajo de la barrera de 20 unidades por dólar.

En la sesión, la moneda mexicana avanzó 12 centavos y cerró en 19.87 unidades por dólar en operaciones de mayoreo, de acuerdo con el precio publicado por el Banco de México, con lo que hiló su quinta sesión al alza.

En la semana acumuló una ganancia de 48 centavos (2.38 por ciento), la mayor en un año, y puso fin a una racha de dos semanas de caídas.

El avance del peso se debe en gran medida a factores relacionados con la política monetaria y expectativas globales, señalaron analistas.

En tanto, el índice referencial de la Bolsa Mexicana de Valores ganó 2.32 por ciento, en medio de compras de oportunidad, tras cuatro sesiones a la baja por los temores a una recesión global.

El índice S&P/BMV/IPC sumó mil 83.62 puntos y concluyó en 47 mil 741.50 unidades. Aún así acumuló una pérdida semanal de 0.57 por ciento para ligar cuatro semanas en declive.

En Wall Street los principales índices subieron con fuerza el viernes por un repunte generalizado, ya que las señales de desaceleración del crecimiento económico y el reciente retroceso de los precios de las materias primas moderaron las expectativas sobre los planes de alzas de tasas de la Reserva Federal.

El Dow Jones subió 2.70 por ciento a 31 mil 505.59 unidades; el S&P 500 ganó 3.08 por ciento a 3 mil 912.71 unidades y el Nasdaq avanzó 3.38 por ciento a 11 mil 612.40 .

En la semana el Dow Jones sumó 5.4 por ciento, el S&P 500 ganó 6.5 por ciento y el Nasdaq se incrementó 7.5 por ciento.

Petroprecios suben

Los precios del petróleo subieron más de 3 dólares por barril, apoyados por una oferta limitada, no obstante, registraron su segunda caída semanal consecutiva por la preocupación de que el aumento de las tasas de interés lleve a la economía mundial a una recesión. En ese contexto, la mezcla mexicana de exportación escaló 3.22 dólares y llegó a 105.61 dólares el barril.