Martes 2 de agosto de 2022, p. 11
La directora general de la Comisión Nacional Contra las Adicciones, Evalinda Barrón, destacó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó que para reforzar la atención a patologías mentales, es necesario eliminar hospitales siquiátricos que no dan un tratamiento de recuperación real.
Al participar en la quinta sesión semanal del curso Salud mental y adicciones, organizado por el Senado, abundó en que se deben establecer servicios comunitarios que ofrezcan esos servicios y atención siquiátrica, así como en cada uno de los hospitales generales del país, para reducir costos y terminar con el estigma hacia esos padecimientos.
Para ello, precisó, es necesario integrar la salud mental en la atención primaria de los servicios médicos del país, debido a que cuando un doctor otorga un diagnóstico de daño mental, pueden pasar hasta 10 años para que el paciente sea atendido, lo que perjudica a las personas en su trabajo y desempeño, así como en el incremento de sus trastornos y afectaciones.
Para adicciones, terapia por definir
En su participación, la presidenta del Senado, Olga Sánchez Cordero, señaló que es fundamental impulsar cambios legislativos orientados a humanizar los servicios de salud mental y de adicciones en el país, según parámetros de la OMS.
Para facilitar la implementación de dichas reformas, advirtió, es menester una amplia difusión y sensibilización sobre sus alcances. Refirió que en el curso han participado más de mil 780 especialistas, doctores y personal médico de diversas entidades federativas del país, quienes han compartido sus propuestas en esta materia.
Este espacio, indicó, representa un esfuerzo para difundir los cambios que se buscan realizar en las leyes, tanto de salud mental, como de combate a las adicciones.
Javier Fernández, secretario de Salud del Estado de México, puso énfasis en que durante la endemia en el periodo 2020-2022, la salud mental se convirtió en un tema central, debido a que, lamentablemente, en México la depresión creció 29 por ciento y 23 por ciento la ansiedad, demencia y estrés postraumático.
Esa situación, dijo, evidenció que la atención a esos daños de la salud humana es un gran reto para las autoridades sanitarias en el país de niveles federal y estatal, por lo cual, el primer paso es atender esta problemática desde casa y en las familias, enfatizar el autocuidado, así como reforzar las redes de apoyo comunitarias.