Madrid. Un Real Madrid casi sin cambios respecto al equipo que ganó la Liga de Campeones de Euro-pa buscará hoy su primer trofeo de la temporada al enfrentar al Eintracht Frankfurt por la Supercopa en Helsinki.

Será la redición de un encuentro histórico que el Madrid le ganó 7-3 a los alemanes en 1960, con cuatro goles de Ferenc Puskás y tres de Alfredo di Stéfano, para alzarse con su quinto campeonato europeo consecutivo, marca a la que nadie se ha acercado desde entonces.

Eintracht viene de conquistar la Liga de Europa, su primer trofeo internacional en 42 años, tras superar en penales al Rangers de Escocia en la final.

El Madrid se coronó campeón de España la pasada temporada y ganó la Champions a pesar de verse superado por sus rivales por largos pasajes. En la final sacó a relucir su estirpe copera y despachó al Liverpool, llevándose su campeonato europeo número 14. Ningún otro equipo ha ganado más de siete.

Para la Supercopa, el conjunto merengue sigue confiando su ataque a Karim Benzema, Vinícius Júnior y Rodrygo, mientras los veteranos Casemiro, Luka Modric y Toni Kroos manejarán el mediocampo. Las únicas incorporaciones descatadas este año fueron las del zaguero Anto-nio Rüdiger y el volante Aurélien Tchouaméni.

Delanteros tenemos muchos, una lista buena, dijo el técnico Carlo Ancelotti en la víspera del partido, también refiriéndose a Eden Hazard, Marco Asensio y Mariano Díaz.

Cuando te falta el mejor delantero del mundo, de momento, esto afecta al equipo. Solución alternativa tenemos, pero sustituir a Benzema es imposible, no hay jugador en el mundo que pueda hacerlo, añadió.

Destacó que con la llegada de Rüdiger y Tchouaméni, el equipo es superior al de la temporada pasada, pues ganó en calidad física y técnica.

No obstante, el timonel indicó que por ahora seguirá apostando al equipo que ganó la Champions el año pasado y que las nuevas incorporaciones deberán esperar su turno.