Jueves 1º de septiembre de 2022, p. 21
La sombra de una fuerte
desaceleración económica a escala mundial y tasas de interés más elevadas mantuvieron a los mercados financieros bajo presión durante agosto.
En México, el comportamiento fue mixto: mientras el Índice de Precios y Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores (S&P/BMV IPC) reportó su peor agosto desde 1998, el peso se apreció frente al dólar y fue de las pocas monedas en cerrar al alza en el mes.
El principal índice accionario mexicano registró una caída de 6.7 por ciento nominal en agosto, su peor caída para un mes similar desde 1998, cuando cayó 29.5 por ciento, para cerrar en los 44 mil 919.22 puntos, su nivel más bajo desde el 1 de marzo de 2021.
El IPC acumuló una caída de 15.68 por ciento en lo que va del año y un desplome de 20.65 por ciento con respecto a su máximo histórico, por lo que oficialmente se puede considerar que entró en un bear market, cuando las acciones en conjunto pierden más de 20 por ciento de valor respecto de su máximo más reciente.
Es decir, en ese periodo los inversionistas han vendido muchos más títulos de los que han comprado, reduciendo la capitalización de las compañías que conforman el mercado. Y es que los inversionistas encuentran mejores oportunidades para hacer crecer su patrimonio en otras bolsas.
Por su parte, el peso se apreció ante el dólar 1.08 por ciento en agosto, equivalente a 21.94 centavos, para cerrar en 20.1432 unidades por dólar spot, según datos del Banco de México (BdeM).
Pese a la fortaleza del dólar a nivel mundial, la moneda mexicana fue de las pocas divisas (rublo ruso, shekel israelí, sol peruano y peso chileno) que reportaron una ganancia ante su similar estadounidense, debido a la expectativa de que el BdeM seguirá subiendo su tasa de interés a un ritmo agresivo para no perder terreno ante la Reserva Federal (Fed).
El índice del dólar, el DXY, que mide su comportamiento ante una canasta de seis monedas internacionales, cerró en 108.627 unidades, ligando tres meses al alza.
El petróleo hiló su segundo mes consecutivo con pérdidas, con un retroceso del WTI de 9.82 por ciento, a 88.94 dólares por barril; mientras el Brent se redujo 12.29 por ciento a 96.49 dólares en el octavo mes del año. La mezcla mexicana cerró en 85.96, una caída mensual de 9.84 por ciento.
Lo anterior, ante la perspectiva de un posible acuerdo sobre el programa nuclear de Irán que devuelva el crudo iraní a un mercado que también se preocupa por la demanda en Estados Unidos y China.
Los mercados accionarios internacionales concluyeron agosto con pérdidas generalizadas. Esto se da después de una recuperación significativa durante julio ante la expectativa de que la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos consideraría una estrategia de aumentos en la tasa de interés menos agresiva que en los meses anteriores.
El S&P 500 cayó 4.24 por ciento en el mes, con lo que muestra un rendimiento negativo de 17.02 por ciento en lo que va de 2022. El Nasdaq cayó 4.64 por ciento en agosto, con lo que ahora muestra una caída de 27.12 por ciento respecto de su máximo histórico.