Jueves 15 de septiembre de 2022, p. 4
Más de 50 piezas arqueológicas fueron entregadas de manera formal este miércoles por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) a la Secretaría de Cultura (SC) federal, por conducto del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Provienen de recuperaciones hechas por las embajadas y consulados de México en el exterior y, de conformidad con la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos, forman parte del patrimonio cultural del país. Ahora quedarán bajo el resguardo del INAH para su análisis, cuidado, conservación y difusión.
En un comunicado conjunto emitido por esas tres instancias, se consigna que los dictámenes realizados por especialistas del INAH confirman que se trata de piezas pertenecientes a diferentes culturas de distintos periodos de la época prehispánica, las cuales fueron restituidas de forma voluntaria a las embajadas de México en Austria, Canadá y Suecia, así como a los consulados de México en Vancouver, Canadá, y Albuquerque, Estados Unidos, por ciudadanos residentes en dichas localidades.
En particular, destacan una urna de origen zapoteco que, según el dictamen del INAH, fue elaborada entre los años 600 y 900 de nuestra era, y un fragmento de columna sustraído de la estructura arquitectónica conocida como El Palacio, en el sitio arqueológico de Santa Rosa Xtampak, en el municipio de Hopelchén, Campeche.
Agradecimiento a los ciudadanos responsables
El gobierno de México agradeció a los ciudadanos que responsablemente han hecho las devoluciones voluntarias
y recordó que las piezas arqueológicas son bienes de la nación que no pueden estar en el mercado, ya que son testimonios de los pueblos que los elaboraron y utilizaron. Cada objeto nos cuenta una historia que nos ayuda a entender nuestra identidad como nación
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Las mencionadas dependencias recordaron que esta entrega se enmarca en los esfuerzos del gobierno de México por la recuperación de su patrimonio cultural sustraído del país de manera ilícita y es producto de la concientización en torno al valor de éste y que se ha fortalecido a través de la campaña #MiPatrimonioNoSeVende
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De acuerdo con un dictamen preliminar realizado por el INAH, ese conjunto de bienes arqueológicos data del periodo Posclásico Tardío (900-1600 dC) y está asociado con grupos humanos de las culturas del desierto, los cuales se asentaron en los territorios que hoy ocupan las entidades del norte de México y del sur de Estados Unidos.
Dicho lote estaba conformado por puntas de proyectil, cuchillos de pedernal, artefactos de concha y hueso, así como fósiles marinos y elementos orgánicos. Fue decomisado por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos y posteriormente entregado al consulado de México en Portland, Oregón.