No cumplió con la fecha para iniciar operaciones y ha querido agregar a más socios
Miércoles 2 de noviembre de 2022, p. 23
El parque eólico Santiago, operado por Iberdrola Renovables del Bajío, no sólo presenta irregularidades sobre su domicilio –razón por la que fue desconectado–, sino también por el inicio de su operación, pues no cumplió con la fecha que le fue informada a la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
La resolución RES/241/2022 emitida en marzo pasado preveía la cancelación del contrato legado con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), no por ubicarse en San Felipe, Guanajuato, en vez de Villa de Arriaga, en San Luis Potosí, sino porque la planta entró en operación hasta 2021, cuando el ente regulador aprobó que no debía hacerlo después del 31 de diciembre de 2019.
El permiso E/1444/AUT/2015 expedido a la filial de la trasnacional española fue concedido originalmente para que iniciara su construcción en julio de 2016 y en diciembre de 2017 iniciara la operación comercial.
Sin embargo, la puesta en operación se fue postergando en diversas ocasiones de tal forma que sobrepasó el límite que era el 31 de diciembre de 2019.
En la resolución la CRE resaltó que en el transitorio 13 de la Ley de la Industria Eléctrica (LIE) se estableció que cuando el interesado no demuestre a la CRE la operación comercial de la capacidad total contemplada en el Contrato de Interconexión Legado a más tardar el 31 de diciembre de 2019
, el contrato compraventa de energía eléctrica, conocidos como legados, se cancelaría.
En la resolución RES/241/2022 la CRE refiere que el acuerdo A/003/2019 sólo permitía que se ampliara por una vez y por un periodo no mayor a seis meses la fecha de operación. La prórroga fue concedida para que el 31 de julio de 2020 entrara en operación, pero tampoco ocurrió.
La propia empresa reconoció en su informe consolidado del primer semestre del año que la planta de Santiago Eólico entró en operación desde enero del ejercicio 2021
.
Ante ello, la CRE ya había negado que fuera modificada la fecha de inicio, con lo cual Iberdrola pretendía evitar que perdiera el contrato legado, hecho que se dio debido a las irregularidades en su ubicación (https://bit.ly/3gWkvPf).
El inicio de operación y su ubicación física no son los únicos problemas que enfrenta la central, pues Iberdrola Renovables del Bajío decidió no tramitar un amparo en contra de la RES/545/2022, la cual rechazó a la firma energética modificar el permiso para que más socios se añadieran, pues se trata de un proyecto de autoabasto.
Recientemente la CRE autorizó a través de la resolución RES/653/2022 que la empresa Sonora Forming se desconectara de la planta, mientras en marzo aprobó en la RES/239/2022 que la firma Magna Assembly Systems de México hiciera lo mismo.
La semana pasada Iberdrola celebró su junta de accionistas para informar sobre los resultados al tercer trimestre del año, pero no informó sobre este problema, el cual se suma a otros que mantiene con las plantas Dulces Nombres I y II, en Pesquería, Nuevo León.