Sábado 5 de noviembre de 2022, p. 2
Madrid. Activistas ecologistas del movimiento Última Generación lanzaron puré de verduras sobre el cuatro El sembrador, de Vincent van Gogh, expuesto en el museo del Palacio Bonaparte, en la capital de Italia, Roma, como parte de una exposición dedicada al pintor neerlandés.
Pese a todo, la obra no sufrió daños, pues la protegía un cristal, algo con lo que contaban los activistas, que reconocieron que su intención no era estropearla.
Según destacaron desde la organización ambientalista, el presente se está viendo eclipsado por una catástrofe real e inminente
, al igual que los elementos más destacados del cuadro –el campo, el agricultor y su casa– se ven desvanecidos por el puré vertido sobre la pintura.
Para Última Generación, su acción trata de demostrar que el cambio climático afecta las garantías de acceso a alimentos, obliga a la población a migrar y pone de manifiesto la necesidad de apostar por una transición hacia la energía sostenible, según la agencia italiana AdnKronos.
Es un grito desesperado, científicamente fundado, que no puede entenderse como simple vandalismo, sino como la manifestación de una amor visceral por la vida y por el arte, que sólo se puede proteger con una intervención seria y oportuna de los gobiernos
, añadió el grupo.
A lo largo de las semanas recientes se produjeron varios episodios similares de activistas de grupos como Just Stop Oil que rociaron pintura, vertieron salsa de tomate e incluso se intentaron pegar la cabeza a cuadros como Los girasoles, también de Van Gogh, o La joven de la perla, de Johannes Vermeer.