Jueves 24 de noviembre de 2022, p. 6
Utrecht. Los brazaletes One Love que la FIFA prohibió en el Mundial de Qatar se están vendiendo como rosquillas. La empresa que los fabrica en la ciudad holandesa de Utrecht informó que se ha agotado el envío de 10 mil a Qatar, la mayoría en las últimas dos semanas. El distintivo multicolor que portarían los capitanes era una campaña que pretendía enviar un mensaje de tolerancia, conexión y oposición a toda forma de discriminación. Ahora la demanda viene de todo el mundo, desde consumidores que quieren tener el brazalete hasta el Parlamento Europeo, que acaba de pedir 500 unidades
, reveló Roland Heerkens, director general de la empresa Badge Direct B.